Super Bowl fue un impulso económico para Nueva York
Alrededor de un millón y medio de personas visitaron el llamado Boulevard del Super Bowl, la zona del centro de Nueva York cortada al tráfico para albergar atracciones paralelas a la final de la NFL, según dio a conocer el gobernador del Estado, Andrew Cuomo.
En un comunicado, Cuomo destacó la estimación como prueba del impacto positivo que el encuentro que se disputó el pasado domingo entre los Broncos de Denver y los Seahawks de Seattle, tuvo para la ciudad.
Según los datos facilitados por el gobernador, los visitantes llegados a la Gran Manzana generaron una actividad económica de entre 280 y 300 millones de dólares.
El Super Bowl se disputó el domingo en el estadio MetLife, de East Rutherford (Nueva Jersey), justo al otro lado del río Hudson, lo que le permitió a la ciudad de Nueva York albergar gran parte de las actividades paralelas.
El acontecimiento anual del fútbol americano supone, según las autoridades, una gran inyección económica para la región.
Durante la semana previa al partido, Nueva York recibió a 230.000 visitantes, incluidos 100.000 que pernoctaron entre 3 y 4 noches, ocupando 35.000 habitaciones de hotel en el Estado.
Solo en hoteles, los aficionados han gastado más de 12 millones de dólares, según la oficina de Cuomo.
En total, se calcula que hasta 400.000 personas llegadas de fuera de Nueva York han participado en actividades paralelas al encuentro.
La Gran Manzana cerró al tráfico el tramo de Broadway entre las calles 34 y 37, entre las emblemáticas plazas de Times Square y Herald Square, y ha bautizado la zona como Boulevard del Super Bowl.
Allí se realizaron firmas de autógrafos de jugadores o la exhibición del Trofeo Vince Lombardi (la copa que ganó el equipo vencedor), el balón que se usó en el encuentro y hasta un tobogán gigante de 21 metros de alto.
En total, alrededor de un millón y medio de personas pasearon por la zona convertida en el epicentro de toda una semana de exclusivas fiestas, conciertos y todo tipo de eventos alrededor del gran partido del año.
Más allá de lo deportivo, el Super Bowl es una máquina de mover dinero sustentada en una audiencia de más de 110 millones de espectadores, que lleva a grandes empresas a invertir hasta 4 millones de dólares en anuncios de 30 segundos.