Andrés Gómez no pudo desquitarse del checo Ivan Lendl y perdió ayer en tres sets en el sexto Máster de Quito por 6-7, 6-4 y 4-10 en súper tie-break. En encuentros oficiales, Lendl había ganado 17 de los 19 partidos que ambos jugaron, el último hace 21 años en Alemania, y en la capital volvió a ganar.  

Contrario a otros días, el sol se hizo presente en todo el partido, no hubo señal de lluvia, lo   que  permitió que la gente acudiera al club Arrayames, en Puembo. Unas 500 personas vieron el partido y disfrutaron con la calidad que aún mantienen los ex tenistas de 51 años.

El primer set fue parejo, tal como el “Zurdo de Oro” afirmó que eran los  partidos entre los dos en antaño. “Siempre eran muy cerrados y él ganaba por el físico”, dijo el viernes en rueda de prensa, antes del encuentro. Golpes precisos, saques potentes y puntos para el aplauso fueron la tónica del juego.

“Recuerden que los dos tenemos la misma edad (51)”, gritó Lendl al público, después de esforzarse para llegar a una pelota, lo que provocó la risa de los espectadores.

Ninguno sacó ventaja, ni se rompió el servicio, por lo que el set se alargó hasta el tie-break. Lendl logró un miniquiebre que se hizo inalcanzable para su rival y fue así que se llevó primer parcial por 7-6 (8-6).

El físico no fue problema para ambos, que se mostraron enteros durante todo el partido, a pesar del radiante sol de mediodía. El checo no se desprendía de su gorra, mientras que el guayaquileño resistió todo el partido con una indumentaria totalmente negra.

En el segundo set llegó el primer quiebre del partido, cuando estaban empatados 3-3. Gómez logró romper el servicio de su rival y se puso en ventaja 4-3. Con buen juego pudo mantener su ritmo y se llevó el segundo parcial por 6-4.

Por el intenso calor, el checo cambió de camiseta en tres ocasiones. Primero lució una roja, luego una blanca y al final una celeste.

Las reglas del Máster decían que si el partido se definía en el tercer set, este debía jugarse en un súper tie-break, lo que quiere decir que el ganador sería el que llegase a 10 puntos. Lendl, casi sin esforzarse, se puso rápidamente en ventaja con un 5-0, que su rival no pudo remontar. El respaldo que el público dio al ecuatoriano fue continuo y Gómez solo alcanzó a descontar algunos puntos.

El checo metió un fuerte servicio, lo que produjo que las cuerdas de la raqueta de Gómez se rompieran. “La próxima no voy a sacar tan fuerte, lo prometo”, bromeó Lendl, mientras el ecuatoriano se acercó a tomar otra raqueta a la banca.

La ventaja se mantuvo hasta el final y el visitante se llevó el último set por 10-4 y quebró la racha de cuatro Másters seguidos que había conseguido el ecuatoriano (solo había caído en el primero, cuando enfrentó a Mats Wilander). Después se jugó un encuentro de dobles a un solo set, en el que la dupla Gómez-Marie Elise Casares venció 6-3 a Lendl-Ximena Herrera.