Selección de España llegó en medio de la algarabía
Con total expectativa unos 1.500 aficionados, identificados con camisetas del Barcelona y Real Madrid, llegaron ayer al aeropuerto José Joaquín Olmedo de Guayaquil para recibir a la selección española de fútbol que arribó cerca de las 15:30 para afrontar mañana su cotejo amistoso ante Ecuador en el Monumental.
Simpatizantes de todo tipo de edades se agolparon en la sala de arribo internacional de la terminal aérea. La mayoría, con cartas y pancartas de Iker Casillas, arquero emblemático de la “Furia Roja”, se encomendó a deidades para ver a sus ídolos europeos.
La familia Zambrano, que reside en España y está de vacaciones actualmente en Guayaquil, llegó con la esperanza de observar a quienes, según dicen, han visto en vivo en el estadio Santiago Bernabéu o el Camp Nou durante el “derbi”.
Con un afiche de Raúl González Blanco, ex delantero de la “Roja” y del Madrid que contenía la leyenda “el eterno capitán”, la familia Zambrano se mostró entusiasmada por la llegada del combinado español.
Las aficionadas, por ver a sus “ídolos”, hasta les ofrecieron pagarles a los guardias del hotelSin embargo, la suerte no la acompañó. No tuvieron la oportunidad de verlos en el aeropuerto, por lo que se dirigieron hasta el hotel donde la delegación europea se concentró. Allí siguieron haciendo vigilia, esperando, a que por lo menos uno de los 19 convocados (eran veinte, pero Cesc Fábregas no viajó por lesión) se asomase a la ventana. “De aquí no me muevo hasta que Iniesta me diga ¡hola!”, acotó Víctor, fan del Barça que asegura estará mañana en el Monumental para no perderse este cotejo internacional.
Además de la familia Zambrano, cientos de fanáticos tuvieron que trasladarse desde el aeropuerto hasta el hotel con la esperanza de poder ver a los jugadores españoles.
Banderas del país ibérico, junto con banderines del R. Madrid y del Barça se observaron en los exteriores. Incluso, una de las seguidoras del equipo campeón del mundo le gritó a un guardia del hotel: “¿Cuánto tengo que pagar para que me dejen entrar?”. La chica, que no quiso identificarse -sus razones tendrá- se enojó tanto que hasta exclamó: “ni si quiera me dejan reservar una suite. Si puedo pagarla (en ese momento levantó su bolso) no sé ¿por qué no me dejan entrar?”.
Por su parte, los seleccionados españoles, una vez que descendieron del avión, y como es costumbre en estos casos, se dirigieron a un bus que salió por la puerta 7 de la pista aérea hasta el hotel donde quedarán concentrados hasta hoy, a las 15:00, hora en que se estima la “Roja” realizará el reconocimiento del Monumental.
Durante el trayecto aficionados acompañaron (detrás del bus) a los jugadores españoles y algunos, los que pudieron, aprovecharon cuando descendieron para tomarles fotos.