José Luis Perlaza no podrá jugar por dos meses y un partido. La Comisión de Disciplina, luego del análisis de la tarjeta roja recibida en el Clásico del Astillero, decidió sancionar por este tiempo al zaguero de Barcelona, que aseguró “no apelar el castigo”.

“Fui bien expulsado porque caí en el error de reaccionar (golpeó a Enner Valencia) a las provocaciones del jugador de Emelec”, aceptó Perlaza, quien pidió disculpas públicamente a la Comisión y a los hinchas del club “canario”, dando una rueda de prensa donde reveló que “mis intenciones no fueron las de ir a tocar, ni cabecear al árbitro (Carlos) Vera”.

Carlos Rodríguez Mora, representante de Barcelona en la Ecuafútbol, adelantó que la presencia de Perlaza en la sesión de ayer y sus disculpas sirvieron de atenuantes para que le hayan rebajado la sanción. También indicó que el club no apelará la suspensión.

El zaguero “torero” ya estaba informado de que una sanción por un intento de agresión a un árbitro, en los estatutos de la FEF, es castigado con entre dos y seis meses, por lo que Perlaza manifestó al retirarse de la Ecuatoriana, antes de poder conocer su sanción, que “cada reacción trae su consecuencia y toca asumirlo”.

El defensa reiteró que su intención no fue agredir al juez y que más bien “quería pedirle una explicación del por qué la roja directa”.

“Caí en el error de reaccionar, me equivoqué, pido disculpas a las personas, los hinchas y al árbitro; fue un momento difícil para mí y la verdad es que me equivoqué”, aseguró Perlaza, quien acotó que “el informe arbitral no ayudó mucho”.

Los árbitros no se paralizan
Después de una conversación con el presidente de la FEF, Luis Chiriboga, el titular de la Agremiación de Árbitros Ecuatorianos, Alfredo Intriago, dio una rueda de prensa para dar la “buena noticia” de que el torneo local no se va a paralizar.

Ayer se reunieron los jueces para decidir si pitarán o no el campeonato este fin de semana. Esto debido a que los réferis querían una sanción más drástica al club Pilahuín Tío por los incidentes en el cotejo con Delfín, en el que hinchas invadieron la cancha e intentaron agredir a los árbitros.

Los réferis esperaron que la Comisión de Disciplina cambiara la decisión con respecto a que Pilahuín juegue sin público. Ellos querían que sean separados del Zonal de Ascenso de segunda categoría.

“No vamos a paralizar el torneo, y sobre el tema de las agresiones del Pilahuin Tío a los compañeros jueces, le damos un voto de confianza a la Ecuatoriana de Fútbol”.

Intriago también se disculpó con el presidente Chiriboga: “Si por defender a mi clase arbitral utilicé algún término inapropiado, pido disculpas”.