El club español Real Madrid tuvo un gesto de solidaridad con la familia ecuatoriana Villamar, su ferviente seguidora, que por apoyarlo el último sábado tuvo un percance con los seguidores radicales de Osasuna, quienes la intimidaron  e intentaron arrebatarle una bandera.

El percance sucedió en los graderíos del estadio Reyno de Navarra, de Pamplona, donde Édgar, el padre y dos de sus hijos (Alejandro y Michael) asistieron para apoyar al conjunto madrileño que visitó al Osasuna por la  trigésima fecha de la Liga española.

“Nosotros no provocamos a nadie. Simplemente mi hijo Alejandro quería alentar al equipo que le gusta llevando un distintivo, que fue la bandera, la colocamos en una varanda y desde ahí el pequeño iba reconociendo a sus figuras, mientras Michael le daba más consejos”, señaló el progenitor  al programa  de televisión “La Sexta”.

Los incidentes fueron registrados por las cámaras de seguridad del escenario y llegaron a conocimiento de los directivos “merengues”, que decidieron recompensar a sus seguidores agredidos y los invitaron a presenciar el duelo por cuartos de final de la Champions League.

El encuentro, entre el Real Madrid y el Apoel Nicosia, se desarrolló el último miércoles en el estadio Bernabéu  y   terminó 5-2 a favor de los dueños de casa, con lo que accedieron a semifinales del certamen.

La familia observó el duelo desde el palco y pudo incluso fotografiarse con el presidente del elenco, Florentino Pérez.
La invitación del cuadro “blanco”, según reseña la página oficial del Real Madrid, fue a los seis integrantes de la familia Villamar, e incluyó la visita al Real Café y al Museo del equipo.

Además pudieron conocer el vestuario y pisar el césped del Bernabéu. “El recorrido  concluyó en el palco del estadio, desde donde vieron el encuentro futbolístico y se fotografiaron con Zinedine Zidane y Fernando Alonso”, acota el comunicado.

El padre de familia calificó como un día inolvidable lo vivido por sus hijos y esposa, quienes viajaron desde Pamplona hasta la capital española.

Precisamente la visita del Madrid a Pamplona (el sábado pasado) despertó el interés de los más pequeños de la familia Villamar. “Desde que sabían que iba a venir el Real a jugar, todos se pusieron contentos y más Alejandro, que por primera vez iba al estadio. Me dio mucha rabia por él, porque se llevó una fea imagen del fútbol, por esas malas personas”.

Sin embargo, transcurridos los días, el susto vivido quedó en el olvido y, para el portal del conjunto madrileño, Villamar contó la emoción que experimentó por la travesía en la ciudad madrileña.

“Es un orgullo estar aquí y todo un detalle del Real Madrid. Se nos pasó el susto. Es cierto que es una pena que haya personas así, pero afortunadamente son pocas. Sabemos que nada tienen que ver con el club; sabemos que es cosa de cuatro”.

Édgar, aún emocionado por el detalle del equipo del que es seguidor, y acompañado de dos de sus hijos, Alejandro y Michael, con quienes también estuvo en el estadio Reyno de Navarra cuando ocurrieron los inconvenientes, reiteró su agradecimiento al Real Madrid.

“Esto significa mucho para nosotros. Es algo inolvidable, grandioso. Muchísimas gracias por el recorrido. Sólo podemos decir eso. No conocíamos el Bernabéu; ya lo conocemos, y de qué manera”.