¿Que nos pasa?
La goleada contra Independiente sigue latente en el recuerdo de la hinchada de Barcelona, pero también lo están las palabras del técnico Gustavo Costas. Después de un 2012 matizado por un vendaval de alegrías, los “canarios” se enfrentan al segundo peor inicio de temporada de su historia.
El primero fue en 2006, año en el que acumularon cuatro derrotas consecutivas en el arranque del torneo. De los quince puntos que se han disputado hasta la fecha solo han sumado 3.
El técnico argentino Gustavo Costas ha enfrentado la crisis futbolística por la que atraviesa el equipo. Después de cada partido, ha expuesto las razones que provocaron el mal rendimiento.
Cuando empezó el campeonato, durante las ruedas de prensa, se lo percibía tranquilo y con seguridad de revertir esa situación. Pero su semblante cambió luego de la goleada 5-2 ante Independiente, el pasado sábado. Su rostro ahora denota preocupación y dolor. Eso quedó en evidencia mientras -inmediatamente después de la derrota- pedía disculpas a la hinchada.
Costas mantiene el anhelo de que el elenco “torero” eleve el nivel, pero con el pasar de los partidos la presión aumenta. Las dudas y murmuraciones sobre su salida comienzan a escucharse, aunque aún en un tono muy bajo.
Los cuestionamientos sobre qué le ocurre a Barcelona y cuáles son los errores del equipo están en el ambiente. Las respuestas las ha entregado el mismo entrenador: falta de contundencia, velocidad, tranquilidad, agresividad y fortaleza defensiva.
Los amarillos, que el año pasado tuvieron la defensa más sólida del torneo, han recibido 8 anotaciones y registran la valla más batida, después de la del Deportivo Quevedo (con 9). A esto hay que sumar los dos goles que le convirtió Nacional por Copa Libertadores de América.
En total, los “canarios” han recibido 10 goles en 5 partidos, lo que arroja una media de 2 goles por encuentro. En 2012 el “Ídolo” tuvo el ataque más “letal” y era un cuadro contundente. Esta es otra clara falencia, ya que lleva 6 goles en 5 partidos disputados, entre torneo y Copa, pero de los cuales 2 fueron por la vía del penal.
Esto da pie para recordar la “falta de agresividad” que mencionó Costas en una de sus intervenciones, lo cual podría atribuirse a la ausencia de jugadores clave al inicio de los partidos, como por ejemplo Damián Díaz, quien entró al cambio ante Independiente y no jugó contra Liga de Loja. Michael Arroyo entró en el segundo tiempo en este partido.
Sin embargo, estas modificaciones se justifican debido a que el equipo compite en dos torneos y, en ese sentido, se evita desgastar a los jugadores. Barcelona incorporó a inicios de año nueve jugadores para tener variantes dentro de su plantilla.
Los futbolistas han dado su apoyo al cuerpo técnico y han asumido responsabilidades. Matías Oyola, capitán del conjunto amarillo, dio declaraciones la mañana de ayer luego del entrenamiento. “En estos momentos los más angustiados somos nosotros, queremos sacar esto adelante. Nos reunimos y estamos comprometidos a hacerlo”.
Máximo Banguera también se refirió a la actualidad del equipo y descartó conflictos dentro del grupo: “No hay problemas internos, ni con dirigentes o entre jugadores”.
Barcelona tendrá este fin de semana, ante el Deportivo Quito, una nueva oportunidad para revertir ese mal momento; y el miércoles jugará contra Boca Jrs. por Libertadores.
La hinchada, jugadores, cuerpo técnico y dirigentes esperan que luego de ese encuentro puedan volver las sonrisas a sus rostros. Hay que recordar lo dicho por el mismo Gustavo Costas a comienzo de año: “No queremos ser conformistas ni mediocres, ahora sueño con la 15”.