Protesta en Brasilia exige libertad de cuatro presos
Aproximadamente 1.000 personas se congregaron ayer en los alrededores del estadio Nacional de Brasilia, poco antes de la apertura de la Copa Confederaciones, para protestar contra el torneo y exigir la liberación de cuatro manifestantes detenidos.
“Libertad para los presos políticos” decía una de las pancartas esgrimidas por los manifestantes, que aludía a cuatro personas que fueron detenidas la noche del viernes, tras haber participado en una manifestación contra el torneo a las puertas del estadio.
Según explicó un portavoz de la Policía a EFE, hacia el lugar se dirigieron 1.300 efectivos de un batallón de élite que iniciaron negociaciones a fin de que se ponga fin a la protesta, realizada en la Torre de TV de Brasilia, a unos 500 metros del estadio donde más tarde Brasil y Japón disputaron el partido inaugural del torneo.
Aunque parecieron deponer la protesta, los manifestantes se dirigieron luego hacia el estadio y lograron llegar frente a uno de los accesos, donde ya comenzaban a entrar las personas que asistieron al partido inaugural de la Copa Confederaciones, que ingresaron apresuradamente y con un visible temor a enfrentamientos.
La Policía, sin embargo, contuvo nuevamente la protesta, aunque los manifestantes permanecieron en el lugar en forma pacífica.
El grupo “¿Copa para quién?” anunció para estos días otras acciones en diversas ciudades del paísAsí como reclamaban la libertad de los cuatro detenidos, los asistentes también insistieron en sus críticas al campeonato organizado por la FIFA. “Dinero para la salud y la educación, no para el fútbol” y “Si tu hijo se enferma lo tendrás que llevar al estadio”, decían otras pancartas, que exhibían brincando y al grito de “Quien no salta es de la FIFA”.
La protesta siguió a una similar realizada el viernes por unas 500 personas que bloquearon el tránsito frente al estadio de Brasilia y le prendieron fuego a más de 200 neumáticos.
La intención era quejarse contra el torneo, el elevado gasto público para el evento y las expropiaciones que ha supuesto en varias de las seis ciudades sedes.
Las protestas fueron convocadas por diversos movimientos sociales, entre ellos el Movimiento Sin Techo, que agrupa a personas sin hogar y ha denunciado que en el país hay unas 50.000 personas que viven en las calles y no reciben ninguna atención del Gobierno.
El grupo “¿Copa para quién?”, que reúne a movimientos sociales opuestos al torneo, ha anunciado para estos días otras acciones en diversas ciudades del país.
Las protestas contra el evento deportivo se han sumado a movilizaciones en diversas ciudades del país contra una reciente alza de las tarifas del transporte público, todo lo cual creó un inesperado clima de tensión antes de la inauguración de la Confederaciones.
El torneo, que durante dos semanas movilizará a decenas de miles de aficionados por el país, será disputado por las selecciones de Brasil, Japón, Italia, México, España, Uruguay, Nigeria y Tahití.