Rafael Nadal derribó la barrera de Cincinnati, uno de los torneos que le faltaban por ganar, y tras superar al estadounidense John Isner por 7-6(8) y 7-6(3) logró su noveno título de la temporada y el vigésimo sexto Masters 1000 de su carrera. “Fue una gran semana y lo que se viene será más difícil. Continuaré con los entrenamientos para mejorar aún más mi nivel”, dijo Nadal.  

Cincinnati se le resistía al jugador español, que desde hoy  figurará como segundo tenista  del mundo  en detrimento del británico Andy  Murray y solo superado por el serbio Novak Djokovic, número uno del circuito. 

El poderoso servicio y el entusiasmo del estadounidense, alentado por el público local y por alcanzar el título más importante de su carrera, tampoco frenó al tenista balear, que sigue sin perder en pista dura en lo que va de la temporada.  

Son ya quince las victorias que acumula en este tipo de piso en el 2013, donde ha alcanzado nueve  títulos en once finales jugadas.     

El Abierto de Estados Unidos será  su nuevo objetivo.  Nadal acumula Cincinnati a los éxitos en Sao Paulo, Acapulco, Indian Wells, Godó, Madrid, Roma, Roland Garros y Montreal. Solo perdió en Viña del Mar ante el argentino Horacio Zeballos y en Montecarlo, contra  Djokovic. Ambas derrotas  se  produjeron en tierra batida.

Solo en 2005, cuando llenó con 11 títulos sus vitrinas, levantó más veces los brazos, pero aquellos trofeos son de menor prestigio y calidad que los de ahora.

Hoy es el tenista más en forma del mundo. Nadie, ni siquiera Nole, que lo ha admitido en público, le discute que es el número uno del momento. En el Abierto de Estados Unidos puede conseguir auparse hasta el trono por tercera vez en su carrera.

Hasta el momento Nadal tiene un trayecto impecable en la temporada, a excepción del torneo de  Wimbledon, del que se despidió en su primer partido.  

Nadal tardó una hora y 55 minutos en acabar con la resistencia de Isner, que tuvo sus oportunidades especialmente en el primer set, en el que dispuso de tres opciones claras  para ganarlo, una de ellas en el desempate.

El español tiene muchas opciones de acabar la temporada como número uno
del mundoNinguno cedió su saque a lo largo del partido y el desenlace se decidió en los tie break, donde el español utilizó su tenis, su cabeza y su experiencia para superar al gigante estadounidense, que encajó así su segunda derrota en un Masters 1000, tras la del pasado año en Indian Wells contra Roger Federer, y la cuarta ante el español, con el que ya había caído en tres ocasiones anteriores, la más reciente en Roland Garros de 2011, cuando Nadal necesitó los cinco sets.

El español tiene muchas opciones de acabar la temporada como número uno del mundo, ya que hasta el final del año no defiende puntos por no haber participado en ningún torneo durante la segunda mitad de la temporada pasada. Por otro lado, sus principales rivales, Novak Djokovic y Andy Murray, tendrán que defender 4.225 y 3.225 puntos, respectivamente.

El serbio aventaja a Nadal en 3.540 puntos pero, a partir del lunes, el balear acortará distancia con el de Belgrado, al sumar al menos 180 puntos por llegar a cuartos de final de Cincinnati. Djokovic ha perdido, además, 420 puntos por no haber podido defender los puntos que obtuvo en 2012 cuando llegó a la final del torneo estadounidense.

Sin embargo, el balear puede reducir aún más la ventaja del serbio si consigue ganar el Masters. En este caso, Nadal sumaría 1.000 puntos y la ventaja del tenista balcánico se verá reducida a 2.120 puntos.

En el Open de Estados Unidos -inicia el 26 de agosto- el mallorquín solo puede sumar puntos, ya que no estuvo en la edición anterior; mientras que Murray solo puede defender los 2.000 que ganó en 2012, cuando se proclamó campeón del último Grand Slam del año.