El futbolista ecuatoriano Moisés Caicedo confesó que estuvo muy cerca de darse por vencido en su primera aventura en el fútbol inglés.

En una entrevista con la página del Chelsea, el volante confesó que cuando viajó para sumarse al Brighton tuvo que estar encerrado en un hotel diez días y todo ese tiempo pasó llorando.

“Vine aquí cuando la COVID estaba explotando, y antes de salir a Inglaterra tuve que quedarme 10 días en un hotel. No tenía a nadie a mi lado. Lloré todos los días allí. Recuerdo que llamé a mis padres y les dije que quería regresar a Ecuador porque todo era muy diferente y no quería estar aquí”, confesó.

La respuesta de sus padres que debía ser fuerte y que se refugie en la oración. “Manténganse fuerte, siga orando porque Dios lo es todo en nuestra vida”, fue parte del mensaje.

Y él recuerda que hizo caso a esa recomendación y salió adelante. “Ahora estoy aquí en el Chelsea, disfrutando de cada partido. Es genial estar aquí, ser parte de este increíble club”, sentenció.