Messi rechaza una oferta de 90 millones de dólares
Hay quienes afirman que la plata mueve al mundo, pero definitivamente no a todos sus protagonistas. Uno de los ejemplos más claros en este sentido es, sin dudas, el argentino Lionel Messi, quien, pese a que le ofrecieron una montaña de dinero, no se inmutó y prefirió seguir en uno de sus lugares favoritos: el FC Barcelona.
¿Qué fue lo que pasó? Antes de que se concretara la renovación de su contrato con el elenco español, apareció un club ruso que estaba totalmente decidido a llevárselo sin importar la cantidad de euros que había que desembolsar. La revelación la hizo ayer el diario español Mundo Deportivo.
En España se especula que la oferta pudo ser del club Anzhi Makachkala, cuyo propietario es el magnate Suleyman Kerimov. La negociación hubiese duplicado los 21 millones de dólares que ganará Messi con el Barcelona español, luego de firmar la extensión de su contrato que lo mantendrá “atado” hasta 2018.
El multimillonario estaba dispuesto a pagar la cláusula de rescisión del contrato del argentino (250 millones de euros). Le ofrecía -además- un contrato por 3 años a la “Pulga”, en el que ganaría 30 millones de dólares por cada uno de ellos (un total de 90).
Las características personales de Suleyman traducen su fortuna, que radica en 7,8 billones de dólares, en un hombre analista, calculador, perceptivo para los buenos negocios y un atleta.
Según Mundo Deportivo, Jorge Messi, padre y representante del futbolista, la oferta era “irrechazable”, pero decidió hacerla a un lado, ya que a “Lio” lo seduce la posibilidad de seguir en el cuadro “culé” y poder aumentar sus vitrinas con más títulos y logros en una liga de primer nivel.
Además, no quería trasladar a su familia luego del reciente nacimiento de su primer hijo. Desde luego, no importó que la extensión del vínculo con los catalanes estuviera lejana, en los números, a la oferta que llegó desde el este de Europa.
Según publica el rotativo español, el padre del jugador reveló que en la decisión influyó mucho el hecho que Lionel juega con un equipo “que se conoce de memoria” y cambiar de aires a un fútbol casi desconocido no le generaba mucho interés.
Messi estuvo en Moscú para jugar por la Champions ante el Spartak, hace poco menos de dos meses. En 2013 volverá a esa ciudad, cuando se presente para un amistoso con la selección argentina. Pero solo estará de paso.