El regreso de Luis Chiriboga desde Portugal será decisivo para el técnico de la selección nacional Sub-20, Julio César Rosero. El presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) será quien decidirá, junto a otros miembros de la Comisión de Selecciones, si el estratega continúa o no en el cargo.  

Pero ayer, el jefe de la delegación Tricolor que participó en el Campeonato Sudamericano de esta categoría, en Argentina, Amílcar Mantilla, empezó a dar luces sobre este tema. El directivo declaró que los jugadores “no son los responsables” de la eliminación.

¿Quién o quiénes lo son? Esa interrogante quedará resuelta cuando Rosero, según lo previsto, entregue su informe a la FEF.

El entrenador dijo a inicios de semana que las causas  del mal desempeño del combinado nacional fueron la ansiedad de los futbolistas y las lesiones, que no les permitieron mantener una alineación regular.

Las declaraciones de Mantilla fueron contundentes. Calificó como “fracaso” el nivel que mostró Ecuador y que le impidió clasificarse al mundial de Turquía.

La eliminación hizo que la FEF realizara cambios en su reglamento. El Comité Ejecutivo de este organismo señaló, la noche del martes pasado, que los clubes no están obligados a alinear a un juvenil este fin de semana. Pero desde  la  cuarta fecha deberán incluir en sus nóminas titulares  a un jugador sub 18.

En este sentido, el técnico de Barcelona, el argentino Gustavo Costas, aclaró ayer  que no está en contra de usar un juvenil, “pero no se puede negar que por fisionomía y edad aún los chicos no están para las grandes ligas como la ecuatoriana”. No es porque tengan 18 años, es porque son chicos a los que todavía “les falta mucho entrenamiento”, explicó.