Madrid espera ser sede de JJ.OO. en su tercera postulación
Madrid, candidata por tercera vez consecutiva a organizar los Juegos Olímpicos, volverá a llamar hoy a la puerta del COI, confiada en sus posibilidades de recibir por fin un voto favorable que coloque su nombre entre las exclusivas ciudades olímpicas, sin perder la cautela.
La delegación española en Buenos Aires, donde Madrid compite con Tokio y Estambul por organizar los Juegos de 2020, es consciente de la dificultad de convencer a los miembros del Comité Olímpico Internacional que tomarán hoy la decisión.
Justo antes de la votación, Madrid 2020 tendrá una última oportunidad de mostrar sus virtudes y el entusiasmo con el que se mantiene en esta carrera, que inició hace más de diez años y que hasta ahora suma las decepciones de 2012 y 2016.
Será en una presentación ante la Asamblea que el COI celebra en Buenos Aires, que cerrará el Príncipe Felipe y que contará también con la intervención del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y del integrante español del COI Juan Antonio Samaranch.
Madrid, Tokio y Estambul tienen experiencia en presentar candidaturasEn la exposición de Madrid 2020 también estarán otras autoridades y deportistas españoles de prestigio, como el basquetbolista Pau Gasol, la nadadora paralímpica Teresa Perales y la delegada internacional de la candidatura, Theresa Zabell.
Todos expondrán que Madrid presenta una candidatura que requeriría una mínima inversión, ya que un 80% de las instalaciones están listas, lo que la candidatura española plantea como un nuevo modelo de organizar los Juegos.
Si Madrid es la elegida, dirán, las administraciones públicas españolas solo deberán aportar poco más de 1.500 millones de euros, frente a los cerca de 13.000 millones de Estambul o los casi 3.400 millones que debería invertir Tokio.
1.500 millones de euros debería invertir Madrid en infraestructura si es elegida como sede de los JJ.OO
3.400 millones de euros debería invertir Tokio si es elegida para organizar los Juegos Olímpicos del 2020Destacarán que Madrid plantea un mapa de instalaciones compacto, en una ciudad de tamaño medio, con una moderna red de transporte, y que además incluye tren de alta velocidad a todas las subsedes.
Presumirán de que la opción de Madrid cuenta con un amplio respaldo de las autoridades y de la población: hasta el 76% de los madrileños apoya la candidatura, según una encuesta del COI, y el 83% y más del 91% en el conjunto del país, de acuerdo a un sondeo realizado en agosto pasado para el Ayuntamiento de la ciudad de Madrid.
A 10.000 kilómetros de Buenos Aires, la última etapa de esta carrera se vivirá intensamente en torno a la céntrica Puerta de Alcalá de Madrid, uno de los símbolos de la capital de España, donde se concentrarán miles de personas para seguir la presentación en pantallas gigantes y el anuncio de la ciudad ganadora.
La elección de Madrid significaría un empuje para la reactivación económica española, ya que se calcula que los Juegos permitirían la creación de 85.000 puestos de trabajo hasta el 2025, además de un incremento significativo del turismo y del comercio a gran escala.
Tres ciudades con experiencia en votaciones
Madrid, Tokio y Estambul, las tres ciudades que se juegan la organización de los Juegos Olímpicos de 2020, tienen experiencia en este tipo de votaciones, pues han presentado candidaturas en el pasado.
La mejor considerada hasta ahora ha sido Madrid, que alcanzó un máximo de 32 votos tanto con la candidatura de 2012 como en la de 2016. En la primera ocasión superó dos rondas y luego fue eliminada por París y Londres; hace cuatro años llegó a la tercera ronda y cayó por 66-32 (votos) ante Río de Janeiro.
Tokio, igualmente candidata a los Juegos de 2016, sumó en su mejor ronda 22 votos. Fue la segunda ciudad eliminada, tras Chicago.
Estambul, que presenta su quinta candidatura, fue la primera eliminada en la elección de los Juegos de 2000, con solo 7 votos; no superó el corte en otras dos ocasiones y sí lo hizo con su candidatura para 2008, cuando obtuvo 17 votos en primera ronda y 9 en la segunda, en la que Pekín ganó de forma apabullante.