Los azules descargaron su ira con insultos hacia Zumba
“¡Simplemente no hay arquero!”. Volvemos a perder la final por la falla del portero”, comentó indignado Andrés Vargas, hincha emelecista que presenció la primera final del campeonato en el bar Porky, ubicado en la ciudadela Garzota, porque no le “quiso dar de comer” a los revendedores.
“Yo amo al Emelec. Asistí a todos los partidos del año en el Capwell, pero por culpa de los revendedores no pudimos (con mis hermanos Marcelo y Leonardo) estar en la final”, indicó.
Con respecto al sitio escogido para observar el cotejo, Andrés señaló que Porky es “el lugar perfecto para ver los partidos de fútbol con amigos”.
Los hermanos Vargas arribaron temprano al bar con su camiseta azul y ploma y cantando ilusionados: “Vamos, vamos Emelec....”.
Cinco minutos antes de que empezara el cotejo, el sitio se abarrotó. Sin embargo, los presentes se las ingeniaron para acomodarse -hasta en el piso- y ver el duelo Emelec vs. Deportivo Quito.
En los primeros 15’, la hinchada azul se mostraba tranquila, a pesar de no ver jugar bien a su equipo. Pero la sonrisa les duró hasta los 29’, cuando un remate flojo de Fidel Martínez terminó en el fondo de las redes. “¡Maldito Zumba!”, fueron las primeras expresiones de los más de 200 hinchas “eléctricos” en Porky.
Para el segundo tiempo, el accionar del “Bombillo” mejoró, pero ni el ingreso de Ángel Mena y Fernando Gaibor les devolvió la alegría a los Vargas, que sumamente indignados con Zumba se fueron pateando tachos por las calles de la ciudadela Garzota. (AA)