No es la primera vez que está al frente de la selección Sub 20. Julio César Rosero la dirigió en el sudamericano de Venezuela 2009 y ahí la “Mini Tri” quedó eliminada en primera fase. Vivió una suerte diferente en el Sudamericano de Perú 2011 como asistente técnico de Sixto Vizuete, con quien logró la clasificación al Mundial de Colombia.
Hace 15 días, tras la salida del adiestrador titular, la Ecuafútbol decidió ponerlo al frente. El miércoles terminó su primer microciclo  nuevamente como DT en Monteolivo (nororiente de Quito).  
El próximo llamado será el 24 de mayo y siempre coincidirá con la convocatoria de la selección absoluta. Haciendo un alto en su último ensayo, Rosero conversó con FANÁTICO. 

¿En qué consistieron los tres días de trabajo?

Básicamente fue un ensayo detallado de táctica fija y fútbol con un tiempo máximo de 80 minutos y sirvió para que los jugadores se fueran acostumbrando al ritmo de competencia exigente de hoy. 

¿Cómo vivió su primera semana como adiestrador titular?

Ahora hay la responsabilidad de estar al frente de un cuerpo técnico, anteriormente era un trabajo compartido. Me siento muy tranquilo y para mí es un honor y una distinción poder estar al frente de una selección Sub 20 de mi país. La tarea es mayor, implica estar pendiente de todo y de solventar las deficiencias con las que llegan los seleccionados en cada convocatoria.

¿Cuál es su preocupación mayor con este grupo?

Vi varias  faltas sobre todo de índole físico. Algunos llegaron con sobrepeso, sin ritmo y para eso se les hacen los exámenes médicos. Con base en esos resultados les mandamos una tabla de tareas a realizar en los clubes. Aspiramos a tener jugadores de alto nivel porque estar en esta categoría es encontrarse a un paso del profesionalismo.

¿Priorizó su anhelo de comandar un plantel, antes de seguir como asistente de Sixto Vizuete?

No fue así, la realidad es que El Nacional nunca se comunicó conmigo. El profesor Vizuete quería tenerme como su ayudante, pero no hubo el interés del club en ningún instante. Y sí en cambio el respaldo de la Ecuafútbol para asumir esa función y continuar un proceso iniciado y, creo, fue lo mejor para mí.

¿Qué aprendió con Sixto Vizuete?

Me enseñó a meterle pasión a esta profesión, a pensar en cosas grandes, a capacitarme y actualizarme. A manejarme siempre con respeto, confianza y lealtad, principios que espero tener en la conformación de todo mi cuerpo técnico.

¿Es más sencillo para un ex jugador familiarizarse en aspectos personales con sus dirigidos?

Uno sabe lo que siente y piensa el futbolista, percibe cuando está deprimido, si pasa momentos difíciles. El jugador es un ser humano bastante diferente, del que se debe estar pendiente  para mimarlo y consentirlo y así elevar su ánimo, pero siempre dentro de la disciplina y respeto para cumplir los objetivos.

¿Prefiere dirigir a jóvenes o a los futbolistas ya formados?

Desde el punto de vista profesional no tengo predilección, pero  es más complejo hacerlo con los chicos porque uno va a decidir en su momento el futuro de ellos. Aquí están terminando su proceso de formación como jugadores y como hombres. Entonces es mayor la responsabilidad de encaminarlos en principios y valores con los pies bien firmes sobre la tierra para saber dignificar esta profesión y ser capaces de asumir las críticas buenas y malas.

¿Cuál es la mayor afección de los futbolistas a esta edad?
El entorno, porque son muchachos que van desarrollándose. A veces piensan o pretenden cosas por el solo hecho de llegar acá, pero aquí se les hace entender que eso se gana con el transcurrir del tiempo, cuando ya se han consagrado en el fútbol siendo titulares en sus equipos manteniendo el mismo ritmo y equilibrio. A veces la falta de cultura también es complicada por eso se los debe guiar por el camino correcto para desarrollar todas las condiciones deportivas que tienen.

¿Cuál ha sido la innovación en su manejo como DT?
He implementado una charla teórica a impartirse en el primer día de cada microciclo. La idea es enseñarles conceptos futbolísticos elementales que todos las personas inmersas en este campo deben saber. Principios básicos ofensivos y defensivos como un desmarque, cobertura, achique. En los estiramientos se les explica sobre los aductores y las razones por las que se realizan determinados ejercicios. La idea es también recabar la opinión de ellos en cada uno de los trabajos.

¿Mantendrá el sistema táctico anterior?

Veremos, según las características de los jugadores. Soy partícipe del 4-4-2 bastante flexible, en el que mis volantes laterales lleguen por los costados y permitan la mayor cantidad de gente posible arriba, pero siempre siendo sólidos en la parte defensiva. Solo así podré crear muchas opciones de gol con los futbolistas talentosos de muy buena técnica. Estamos observando a muchos delanteros en los que se debe trabajar más. Por eso conversaré con los técnicos de los equipos para que se intensifiquen esas tareas específicas y en los clubes se termine la formación deportiva.

En su opinión, ¿hoy es más fácil ser futbolista?

Existen más oportunidades porque desde los 12 años comienzan a  competir. Antes no existía eso. Los que teníamos talento jugábamos a los 18 años en  primera división, ahora llegan con más recorrido, por ejemplo Andrés López, del Deportivo Cuenca, con solo 19 años tiene 70 partidos en primera división entre torneos nacionales y Copa Libertadores. Además el ser parte de la selección menor constituye una vitrina para ser observados.