Las estrellas del tenis actual pasaron por la Junior Davis
Les escribo desde San Luis Potosí, México, donde tengo el honor de estar cumpliendo la función de capitán del equipo ecuatoriano de varones en la competencia por equipos más importante a nivel mundial en la categoría juvenil, la Junior Davis Cup o Copa Davis Juvenil.
Este es un torneo oficial de la Federación Internacional de Tenis, que este 2011 se encuentra en su vigésima séptima edición y que se disputó por primera vez en 1985 en la ciudad de Kobe, Japón, con el nombre de World Youth Cup o Copa Mundial Juvenil, hasta que en 2002 pasó a llamarse Junior Davis Cup en la categoría masculina y Junior Fed Cup en la femenina.
Para llegar a esta instancia final en México, los países presentes tuvieron que pasar a través de duras eliminatorias regionales, y de 105 naciones participantes solamente 16 obtuvieron su clasificación, muchos jugadores de gran calidad quedaron fuera al no contar con compañeros de similar nivel, con quienes formar un equipo sólido.
Entre las sorpresas de este año están las ausencias del equipo de Estados Unidos, que perdió su clasificación contra Canadá, así como la de España, una potencia del tenis mundial en todas las edades.
Por todas estas razones, hay que destacar la presencia de la selección del Ecuador en este selecto y exclusivo grupo.
Los integrantes del equipo nacional que logró esta clasificación son: José Andrés Chamba, Andrés Cabezas y Juan Carvajal, al conseguir el tercer puesto en el Campeonato Sudamericano realizado en Argentina, con Andrés Gómez como capitán. Los 16 países que clasificaron este 2011 fueron: Chile , Argentina, Ecuador, Canadá, México, Francia, Gran Bretaña, Italia, Alemania, Túnez, Japón, Hong Kong, Tailandia, Australia, Sudáfrica e Israel.
Para tener una mejor idea de la importancia que esta competición tiene para cada uno de los países participantes, podemos ver que Australia envió como capitán de sus chicos a Pat Cash, campeón de Wimbledon en 1987, el capitán británico es Greg Rusedski, otrora finalista del abierto de los Estados Unidos, el equipo canadiense es dirigido por Martin Laurendeau, actual capitán del equipo Copa Davis, que hace dos semanas consiguió el ascenso al grupo Mundial venciendo como visitantes a Israel.
Durante el torneo pude conversar con Pat Cash y le pregunté, ¿cuál era su motivación, siendo un ex campeón de Wimbledon, una gran estrella en su país de venir como capitán del equipo australiano juvenil a San Luis Potosí?, me respondió que disfrutaba trabajar con jugadores jóvenes de entre 14 y 16 años, que sentía que a esa edad era cuando más les podía enseñar y aportar a su desarrollo tenístico, lo cual le daba una gran satisfacción personal.
Pude notar en su cara y en sus palabras esa pasión, ese amor por el tenis, esa alegría de estar haciendo lo que más le gusta, y eso es lo que nos motiva a todos los que queremos a este deporte y seguimos involucrados en el por medio de la enseñanza y de competencias como esta.
La verdad es que su respuesta no me sorprendió en menor grado.
En este torneo, muchos jóvenes tenistas empiezan a sentir por primera vez la responsabilidad de defender los colores nacionales y a manejar la presión de dejar en alto el nombre de sus respectivos países, una presión totalmente diferente a la que se vive en los torneos individuales.
Las principales estrellas del tenis mundial como Roger Federer, Rafael Nadal, Novak Djokovic, Andy Roddick son algunos de los nombres que ya pasaron por este prestigioso evento.
El equipo ecuatoriano regresa por primera vez desde el 2005 a este grupo de élite, año en que se consiguió un histórico tercer lugar, con Patricio Alvarado, Gonzalo Escobar y Juan Martín Paredes, capitaneados por Orlando Quiñónez.
Al escribir estas líneas, el equipo ecuatoriano ha sufrido dos derrotas, caímos contra Francia 3 a 0 y frente a Túnez por el mismo marcador, esperamos recuperarnos en las próximas series que debemos afrontar y escalar algunas posiciones, aunque ya no aspiremos a los primeros lugares.
El torneo se juega por cuarto año consecutivo en esta ciudad, en el Centro Deportivo La Loma como sede principal, y el Club Libanés Potosino como subsede, ambos con excelentes instalaciones deportivas y sociales, con todos los servicios para los deportistas.
Los organizadores hicieron un gran esfuerzo para que el alojamiento, transportación, seguridad, atención médica y la alimentación sean de la más alta calidad y que a los tenistas no les faltara nada.
En 2012 el Real Club de Polo de Barcelona, España, será la nueva sede del torneo, lo que significará además un cambio de superficie y de condiciones, puesto que pasará del cemento y los 1.900 metros de San Luis Potosí, al nivel del mar y la lenta arcilla roja de la capital de Cataluña, lo que en mi opinión representa un cambio positivo en el aspecto técnico, se va a ver un tenis de mejor calidad, pues la altura siempre causas problemas para controlar la pelota, ya en la parte organizativa, los españoles tendrán la difícil tarea de superar a los mexicanos.
Nosotros en Ecuador tenemos que seguir trabajando más y mejor, jugadores, entrenadores, dirigentes, entidades deportivas oficiales, empresa privada, para que nuestra presencia en estos eventos sea permanente y no tengamos que esperar varios años como en esta ocasión y, en un futuro cercano, celebrar un título mundial.