El mayor de 3 hermanos empezó a practicar hace 7 años
La vigorosidad y dinámica del judo cautivaron a Andrade
Perfeccionar la técnica ‘uchi mata’ le ha permitido a Jonathan Andrade sobresalir desde hace 7 años, cuando descubrió este arte marcial de origen japonés. Avalado por esa destreza, el judoca quiteño confía en que se colgará la medalla de oro en los próximos Juegos Nacionales Juveniles, cuyas competencias en esta disciplina empezarán el 14 de mayo en el Centro de Entrenamiento para el Alto Rendimiento (CEAR) de Carpuela (Imbabura).
Con su estatura de 1,73 metros puede dominar con facilidad a sus rivales en la categoría juvenil. “Con el ‘uchi mata’ controlo a mi oponente en la parte superior, alzo mi pierna por el medio de mi rival y trato de someterlo contra el ‘tatami’ (colchoneta)”, comentó el quiteño durante un entrenamiento en la Concentración Deportiva de Pichincha (CDP).
Él conforma la selección de Pichincha de judo que la completan Christian Cobos, Diana Díaz, Yolanda Arcos y Yulexi Armijos. La entrenadora Nathali Soria reconoció que el quinteto de la provincia ‘oro y grana’ tiene la capacidad de alcanzar el podio en los V Juegos Juveniles. “Los 5 chicos han seguido un proceso desde la categoría infantil con buenos resultados, ahora tienen más experiencia y están entre los favoritos”.
Los combates duran 5 minutos y si ninguno de los judocas logra
el ‘ippon’, se suma
los puntos.La dedicación que tiene Andrade le permite ser un serio candidato a la presea dorada. “Me gusta todo del judo. Aprendes muchas cosas porque no se queda en una sola técnica para ganar, sino que tiene muchas variantes. Dejo de lado cualquier cosa para ir a entrenar; es mi estilo de vida”, afirmó.
En 2010, cuando era juvenil, Jonathan tuvo sus mejores actuaciones. Terminó segundo en un Sudamericano en Uruguay y tercero en un Panamericano en Panamá. El año pasado no pudo participar internacionalmente, pero fue campeón nacional y terminó segundo y tercero respectivamente en los Juegos Nacionales Prejuveniles y Juegos Nacionales Juveniles.
El punto alto de su día son las 3 horas que practica en el coliseo de judo de la CDP, pero reconoció que nada se compara con la competencia. “En los combates soy muy activo, me muevo mucho y siempre estoy ansioso por luchar. Observo cómo se desplaza mi contrincante, para planear mi estrategia”. Jonathan reconoció que cuando comete algún error, hace un mea culpa. Y para evitar que se repita, entrena con más compromiso.
Hace 7 años empezó con este arte marcial junto a su hermano Charlie, pero él no se entusiasmó como Jonathan y lo abandonó. Su otro hermano, Brandon, no lo practica. Toda la familia Andrade está pendiente de las actuaciones del mayor de los 3 hermanos, pero no acuden a las competencias. “Mis padres y yo nos ponemos nerviosos y me generan una presión adicional verlos allí”, contó.
Asiduo lector
El judoca juvenil terminó los estudios en el colegio Santiago de Guayaquil, de la capital. En el próximo año lectivo ingresará a la universidad y por ahora se dedica de lleno a entrenar 3 horas diarias en las instalaciones de la CDP.
Su tiempo libre lo ocupa en la lectura. Su autor favorito es Paulo Coelho, pero ahora está leyendo ‘Los ojos del perro siberiano’, del argentino Antonio Santa Ana. Disfruta también los relatos de acción.
La comida chatarra es lo que más disfruta. El pollo frito y las hamburguesas son sus platillos favoritos, pero por su condición de deportista solo se da estos ‘lujos’ una vez al mes. Diariamente consume pollo, carne y verduras.
Desayuna pan, huevos, jugo y leche. Al mediodía come fruta o un sánduche. Toma su almuerzo antes de entrenar y a media tarde complementa su dieta con más frutas. En la noche también se alimenta abundantemente. “Después de las prácticas me muero de hambre y como muchísimo. Solo los días antes de la competencia trato de reducir mis comidas”, reconoció el seleccionado de Pichincha.
DATOS
El japonés Toshihiko Koga es su referente del judo. Aunque ya está retirado, la técnica ‘seinage’ que emplea el doble medallista olímpico sobre el ‘tatami’, lo motivan a esforzarse más.
En el judo el combate se acaba cuando uno de los deportistas realiza un ‘ippon’, es decir que la espalda del judoca debe estar asentada completamente sobre el ‘tatami’ (colchoneta).
Los V Juegos Nacionales Juveniles arrancarán el 2 de mayo y finalizarán el 16. Las competencias de los 19 deportes se las hará en los CEAR de Macas, Carpuela y Rioverde, además de Cuenca