La selección de fútbol del Ecuador es la que generalmente  mueve masas cada vez que juega por  eliminatorias en el estadio Olímpico Atahualpa. Pero hoy  existe   un combinado nacional que va ganando seguidores y  abriéndose  campo:   la “Tri” de futsal.

Este deporte, una mezcla del baloncesto, balonmano, waterpolo y el mismo balompié, se originó luego de que Uruguay alcanzara  su esplendor futbolístico, tras los Juegos Olímpicos de 1924 (Holanda), 1928 (Francia) y la Copa del Mundo de 1930, disputada en suelo “charrúa”. Tras levantar el cetro, los anfitriones crearon un derivado de esta disciplina: el futsal.

“El fútbol de salón o sala cuenta con una amplia historia en el mundo, y en Ecuador fue introducido hace aproximadamente 20 años”, precisa  Rémulo Sotomayor, entrenador nacional de esta disciplina, quien   lleva más de un mes realizando un microciclo con jugadores de la  Costa y la  Sierra, para elegir a los 22 elementos que  participarán en el Sudamericano de Gramado (del 15 al 22 de abril), en Brasil.

Dicho  torneo  otorga 4 cupos -a los semifinalistas- para el Mundial de Tailandia, que se efectuará este año (fecha por definir) en las ciudades de Bangkok y Nakhon Ratchasima.

En el clasificatorio, la “Tri” comparte el Grupo 2 con Uruguay, Paraguay, Colombia y Venezuela.

“Estoy seguro de que las eliminatorias nos servirán para que el equipo  gane experiencia, ya que muchos  de los que integran la selección vienen  jugando juntos desde hace más de 4 años; y a ellos se suman dos refuerzos que vienen despuntando en el  primer Campeonato Nacional 2011”, señaló el estratega.

Jorge Sandoval y Julio Díaz  convencieron con sus gambetas y piques cortos al profesor Sotomayor, que también cuenta entre sus dirigidos con  Henry García,  el portador de la banda de capitán en el Sudamericano.

“Para mí es  una gran responsabilidad  portar la cinta, pero  dentro de la cancha   estamos al mismo nivel; digo esto porque acá subimos, bajamos y marcamos todos”, expresó García, más conocido como “Naranjilla”, porque le fascina ese jugo.

Por su parte, Sandoval recibió su primer llamado a la selección de futsal después de haber tenido una buena campaña con Atlético Estudiantil, en la primera edición del torneo nacional.

Este “pelotero” de Pichincha, que trabaja alquilando canchas sintéticas en Quito, comentó que estaba a punto de retirarse por completo del fútbol, pero que vio en el futsal  la manera de recuperar las esperanzas que perdió cuando no tuvo la chance de llegar al equipo principal  de Liga de Quito, club que lo vio nacer futbolísticamente.

“A mis 30 años estoy viviendo cosas emocionantes en este deporte, atrás quedaron mis  buenos recuerdos de cuando jugué en Liga, Universidad Católica, Aucas, equipos de los que me retiré por varios inconvenientes. Antes lo mío era el fútbol de 11, pero acá en futsal, que se juega con 5, he sentido que he   vuelto a nacer”.

Sandoval  cuestionó un poco la falta de apoyo hacia este deporte en el país, ya que en otros  (nombró Argentina como ejemplo) las federaciones obligan a jugar un torneo nacional de futsal  conjuntamente con el campeonato de primera división a los clubes.

“En Argentina, Uruguay y Brasil el futsal es bien remunerado; Es un deporte profesional más. En Ecuador, en cambio, no. Yo estoy acá porque el ‘profe’ confió en mí y  también porque me apoyo con mis propios ingresos. En la selección faltan buenos jugadores, que tengo entendido no vinieron porque no les dieron permiso en sus trabajos”.
Como Jorge piensan el técnico Sotomayor y el “Capi” García, quienes, a pesar de los inconvenientes, confían  conseguir un cupo a la cita ecuménica de este año.

“Si la selección de fútbol clasificó a la Copa del Mundo de Corea en 2002, ¿por qué nosotros no podemos ganar el boleto a Tailandia?... Esta es nuestra oportunidad de hacer historia”, acotó el DT del combinado nacional.

A Brasil viajará una delegación de 22 personas, entre  jugadores, cuerpo técnico y dirigentes. El estado de Gramado, donde se desarrollará el certamen, tiene las mismas características  climáticas que  Guayaquil; fue por eso que el entrenador Sotomayor eligió el puerto como base de entrenamiento.

“Donde jugaremos el clima es húmedo y caluroso, debido a esto, ensayamos a doble jornada en el Guayas para irnos adaptando”.