“La fanaticada creció a nivel nacional en nuestra época”
“Barcelona ha significado todo para mí, es mi vida. No le encontraría una definición exacta a esa sensación que tengo cada vez que recuerdo todo lo que pude hacer en mi equipo.
Gracias a Dios puede ser campeón y además estar en esa grandiosa hazaña de La Plata, cuando le ganamos (1-0) a Estudiantes en su estadio (en 1971, los Pinchas eran tricampeones vigentes de la Copa Libertadores). Con triunfos como ese es que la hinchada de Barcelona creció a nivel nacional en nuestra época.
El fútbol no me dejó plata, a nadie de los que jugaron en mi época (estuvo en Barcelona de 1957 a 1971), pero me dejó amistades y muchísimos conocidos. Cada vez que paso por las calles, las personas me saludan. Esas son cosas que me quedan de mi época de jugador.
Todos los días las personas se me acercan y me preguntan cosas de Barcelona, todavía me piden autógrafos y quieren tomarse fotos conmigo. Eso me llena de orgullo, porque aquello habla de que hice las cosas bien cuando estuve en el club.
Fui campeón en 1960, 1963, 1966, 1970, 1971. Pude dar la vuelta olímpica en mi último año en Barcelona. Esas son cosas que no se olvidan. Por el momento, no estoy en actividad porque recién me operé de la cadera, pero hasta el año pasado fui técnico de la selección de la empresa Andec. Tuve que renunciar justamente por mi problema de salud.
La actual dirigencia del equipo, en especial el presidente Antonio Noboa, me ayudó con el tema de mi operación de cadera, por eso estoy muy agradecido”.