Vasos llenos de cerveza junto a los asientos de los hinchas, que a sorbos disfrutaron mientras observaron el partido entre El Nacional y Barcelona, fue la tónica ayer en la mayoría de sectores del estadio Atahualpa.

Pese a que el intendente de Policía, Fausto Velásquez, estableció la venta de la bebida de moderación solo como acompañante de un plato de comida y uno por persona, los vendedores no acataron la disposición. 

En la tribuna norte una mujer desprovista del mandil blanco que caracteriza a los comerciantes asociados, con una bandeja roja colocada en los asientos vacíos, llamaba la atención de los hinchas al vocear junto al agua y las colas, la cerveza, mientras los policías en un costado disfrutaban de su momento de lunch en el entretiempo.

Incluso en el palco, donde se ubicó la dirigencia de Barcelona, varios hinchas acudieron hasta sus puestos con los vasos de cerveza. La única vendedora que estuvo en ese sector solo expendió sánduches, gaseosas y agua.

Según Juan Zapata, director de operaciones del Distrito Metropolitano de Quito, en el operativo de control se incautaron 4 armas blancas en manos de los hinchas de Barcelona.

Además se impidió el ingreso de 5 aficionados, por ser parte de los 200 violentos que tiene registrados la Policía Nacional. También se prohibió la entrada de tres personas en estado de ebriedad.