Mantener el invicto que al momento ambos planteles poseen en la segunda etapa del certamen es la meta que persiguen Liga de Quito y Barcelona, elencos  protagonistas del partido más atractivo de la jornada, hoy (11:30) en Casa Blanca.

El elenco porteño es el líder del torneo, con 10 puntos (+6), mientras LDU es segunda, con 8 (+2).

Además será un duelo de los mayores romperredes del torneo local. El barcelonista Narciso Mina comanda la tabla con 18 conquistas y tiene como escolta al naturalizado  Claudio Bieler, con 16 goles.

En el plantel local habrá dos variantes. En el rol titular saltará  como volante por izquierda el paraguayo  Eduardo Echeverría y el experimentado polifuncional de 38 años, Ulises De la Cruz, irá en media cancha en lugar del hábil Joao Plata, quien no logró recuperarse totalmente de la molestia en su pie derecho.

Además aguardará en el banco de suplentes  el   argentino Pablo Vitti, la última incorporación extranjera del cuadro de la Universidad Central y quien cumplió su primera semana de entrenamiento  bajo las órdenes del técnico Edgardo Bauza.

“Este tipo de encuentros es bonito de jugar, será muy cerrado y el que logre controlar mejor el balón y cometa menos errores puede llevarse los puntos”, sostuvo Bauza.

De su parte el estratega de Barcelona, Gustavo Costas, destacó que tiene listo el equipo titular con el que enfrentará a Liga, pero no se atrevió a darlo porque no descarta alguna variante de último momento previo al viaje a Quito.
Al que sí confirmó fue a Brayan de la Torre como volante-lateral por derecha, debido a la expulsión de Pablo Saucedo y la lesión que aún padece Miguel Ibarra.

“Liga es un gran equipo.  No tuvo una buena primera etapa, pero ahora está ahí, con nosotros, peleando la posibilidad de llegar primeros”, expresó Costas, quien  advirtió a sus jugadores que no reclamen las decisiones arbitrales.

“Si se fijan, siempre en la primera falta que hacemos en el partido nos exhiben amarilla y eso nos condiciona. Hay árbitros que te sacan de la trayectoria del compromiso con sus decisiones, por eso les dije a mis dirigidos que se dediquen a jugar y nada más”, indicó.

Para los jugadores del “Ídolo del Astillero” este partido tiene un ingrediente adicional, ya que nunca  han ganado en este escenario desde que Casa Blanca abrió sus puertas en marzo de 1997. “Será un  partido intenso, el anterior estuvimos a punto de ganarlo”, lanzó Costas.