Desfilando con su tradicional traje de falda larga hasta los talones, con  una faja bordada a la altura de la cintura, su camisa blanca con bordados característicos de su cultura, y unas zapatillas hechas de tela y fibra de totora (alpargatas) se presentó la pequeña Kelly Pincay en la pista sintética de Fedeguayas.

En compañía de sus compañeros de la escuela intercultural “Roca Mía”, ubicada en Flor de Bastión, la pequeña expuso su discurso al jurado calificador, en su idioma nativo,  kichwa, con el que se llevó los aplausos de los asistentes a los I Juegos Autóctonos Deportivos de la Costa y Galápagos.

Este evento, que se realizó entre el jueves y viernes pasado, fue organizado por la Dirección Intercultural Kichwa y la Federación Deportiva del Guayas, con la intención de que no desaparezcan las tradiciones ancestrales y se siga promoviendo la inclusión de los ecuatorianos. Así lo manifestó la titular de Fedeguayas, Pierina Correa.

“En el deporte no hay diferencias, sino que une a la gente y eso es lo que viene promoviendo este Gobierno, la inclusión de todos los ciudadanos por igual... Hemos rescatado el kichwa, porque como lo dice la Constitución, es el segundo idioma oficial del país. No debemos renunciar a nuestras tradiciones”.

Además, la dirigente expuso que los centros indígenas serán incluidos dentro de la planificación del departamento metodológico para apoyarlos en los diferentes torneos deportivos que participen y que así en un futuro puedan formar parte de la selección de Guayas.

Por su parte la directora de la Dirección Intercultural, Martha Yuquilema, sostuvo que es una buena iniciativa el desarrollo de los Juegos porque a través del deporte demuestran su cultura y fortalecen su identidad. Después de los discursos de inauguración se proclamó a la “ñusta” (reina), que recayó en la pequeña Kelly. Además se eligió al mejor equipo uniformado, que fue ganado por la escuela Belén.

El Himno del Ecuador y el del deporte fue entonado en kichwa por el público presente, con el acompañamiento de banda de la Policía Nacional.

Fueron nueve instituciones de los diferentes cantones de la provincia del Guayas que se dieron cita a estas olimpiadas, en las que se disputaron juegos autóctonos como: la “chonta”, el trompo, los “atracones” y ollas encantadas.

En esta última actuó Correa, quien tras ser cubiertos sus ojos con una venda se dispuso a romper la olla de barro colocada en el centro de una cuerda sostenida. La ex voleibolista no pudo atinar el golpe, pero de todas maneras se le entregó la olla como recuerdo. Después de ella también participaron los demás dirigentes invitados al evento.

Luego continuó la actividad de los “atracones”, que consistía en comer en el menor tiempo posible una variedad de alimentos. Mellocos, habas, choclo, guineo, papa y un vaso de colada formaron el festín con el que se deleitaron cinco estudiantes. Luego, las competencias del chasqui, la chonta y el trompo se ejecutaron en la pista atlética del estadio Alberto Spencer.

También en la cancha sintética de Fedeguayas se disputó un torneo de fútbol interescolar. Las escuelas que participaron fueron el Centro Intercultural Atahualpa (Samborondón), Achick Amawtay (Durán), Cacique (Playas), Roca Mía (Flor de Bastión), Sultana de Los Andes, Santiago de Guayaquil, Kaypimi Kanchik, Manantial de Vida y Belén (Guayaquil). (APS)