Emelec repite la dosis frente a clubes brasileños. Sumó su segundo triunfo ante “auriverdes” en la Libertadores y por la vía del penal. En 2012 por la fase de grupos se impuso 3-2, con gol en el último minuto, al Flamengo de Ronaldinho, y anoche hizo lo mismo, pero  2-1, frente al Fluminense. El verdugo, en ambas ocasiones,  tuvo un nombre: Fernando Gaibor.

Como era de esperarse, los azules salieron desde el inicio a abrir el marcador. Marcos Mondaini y Énner Valencia fueron los motores por las bandas del conjunto “eléctrico”. El “Flu” aún no terminaba de acomodarse en la cancha del Capwell, cuando el “Diablo” estrelló un balón en el horizontal a los 3’.

Las llegadas continuaron bajo los tres palos del golero brasileño Diego Cavalieri, pero la poca eficacia de los locales no les permitió ponerse arriba. El visitante, en tanto, insistió en controlar más la pelota y cambiar la banda con pelotazos largos.

Cuando  Mondaini y Valencia avisaban tibiamente, fue Carlos Vera el que se lanzó al ataque por derecha y sacó un tiro que el zaguero Leandro Euzébio trató de despejar con media chilena, pero para su mala fortuna el esférico se internó en la propia meta. Emelec no se conformó  y siguió buscando el arco, pero asimismo, la poca eficiencia de sus arietes le jugó una mala pasada. A los 43’ Wagner Ferreira le dio el empate al “Flu”. El volante  brasileño sacó un zapatazo inatajable para Esteban Dreer.

Para la segunda etapa, la fórmula era la misma, con Mondaini llegando al área, pero sin nadie a quien dársela. Mientras que Marlon De Jesús tuvo una oportunidad, pero no pudo definir. Gaibor ingresó a los 76’ y así llegó el segundo tanto azul. Mondaini fue derribado  por Euzébio y se pitó un penal; al cobro fue Gaibor. Con el gol, el “Ballet” se ilusiona con pasar a los cuartos de final.