Ferroviario, “encarrilado” al ascenso
Así como la vía del ferrocarril tomó vida en Durán el año anterior, el legendario club deportivo de ese cantón, Ferroviario, anunció su regreso a la actividad futbolística tras 15 años de ausencia.
De igual forma como hizo el General Eloy Alfaro cuando continuó la obra iniciada por el ex presidente Gabriel García Moreno, así Jipson Contreras, titular de la institución, se las ingenió para rescatar al conjunto de fútbol más representativo de los habitantes duraneños.
Contreras, con el apoyo del Municipio de Durán y la empresa privada, inscribió al elenco Ferroviario en el torneo de segunda categoría del Guayas, donde otros 17 clubes más pugnarán por ser el campeón provincial.
“La idea ya la veníamos analizando desde el 2010, cuando competimos en el campeonato con el nombre de Paladin’s. Ahora, con orgullo volveremos a vestir la camiseta ‘ferroviaria’, tal y como lo hicimos hasta la temporada 1995”, contó Jipson.
El equipo mantuvo la base del año anterior que se erigió vicecampeón (perdió la final ante Calvi) del torneo de Guayas y accedió al zonal donde se enfrentó a Gualaceo, JVC, Abuelos y Sport Bilbao.
“Acá se quedaron casi todos. Desde el cuerpo técnico hasta los jugadores fueron ratificados por la directiva, porque hicieron un buen trabajo”, agregó Contreras, “y desde ahí partiremos con la ilusión de conseguir el anhelado ascenso a la serie B”.
El profesor Roberto Carvajal es el timonel de esta plantilla joven. Él también compartió sus enseñanzas en las divisiones formativas de Everest, Calvi, AD Naval, Barcelona y Emelec.
“Agradezco a Jipson y Dalton Narváez (alcalde del cantón Durán y presidente vitalicio del club), porque por ellos logré conformar un grupo competitivo. Estoy seguro de que este año subiremos al balompié profesional”, declaró Carvajal.
Con esa misma confianza afrontarán el campeonato los 25 jugadores que conforman la escuadra duraneña; de entre quienes sobresalen los hermanos Álex y Adrián Mancheno, quienes se convirtieron en las figuras con la casaca de Paladin’s en 2010.
En enero del año anterior, Carvajal cuenta que junto con los miembros del cuerpo técnico iniciaron un proceso de reclutamiento de chicos. Al llamado asistieron más de 80 y después de una selección se quedaron con 25, la mayoría habitantes de Durán.
“Queremos que la gente se identifique con el equipo, que lo sienta suyo y sepa que juntos podemos lograr el ascenso”, afirmó el estratega, quien solicitó un refuerzo tipo “A” a la directiva “ferroviaria”.
Los miembros de la comisión de fútbol pensaron en el volante de corte Leoverlis Mina, que jugó en el Manta hasta junio del 2010, antes de sufrir una rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha que lo marginó por 4 meses de las canchas.
“Pensé que después de la operación no iba a poder jugar de nuevo”, señaló Mina, “no me quedé en Manta porque finalizó mi contrato. Recibí una llamada con la oferta de Ferroviario y me pareció interesante el proyecto”.
Y es que a pesar de que no parezca ser un grande del fútbol ecuatoriano, Ferroviario tiene una gran historia. El club, fundado en 1932, se enfrentó a Emelec y Barcelona por el torneo provincial en los años 60 y 70, antes de conformarse el Campeonato Nacional. “Sin duda que esos partidos eran inolvidables. Me dice mi abuelo que antes el equipo tenía que cruzar el río Guayas en lancha para jugar contra los del Astillero. Eran años dorados para nuestro balompié”, recordó el máximo representante del club.
Ahora Ferroviario cuenta con el apoyo de sus hinchas para movilizarse, ya que las cooperativas 16 y 17 de Octubre facilitan los buses para que el equipo se dirija a jugar en el estadio Fertisa (sur de Guayaquil), FEDER, la ESPOL y en el Ramón Unamuno.
“Los dueños de las cooperativas nos hacen expreso sin cobrarnos. Ese patriotismo se siente acá. Asimismo hay madres que tras las prácticas en el estadio Sandiford, realizan asados para el equipo. Todo eso nos une y hace más fuertes”, indicó el DT Carvajal.
Los otros cuadros
Guayaquil FC es la nueva institución que disputará el torneo de segunda. Omar Viteri es el presidente del club y gerente general de la compañía Torplas, en el Puerto.
El elenco dirigido por el argentino Carlos Mendoza cuenta para el año de su debut con un presupuesto de 200.000 dólares y entrena en la cancha sintética de la ciudad deportiva Carlos Pérez Peraso.
Los cotejos de local los realizará en Fertisa, donde la mayoría de los clubes lo hacen, ya que no cuentan con un escenario propio para militar. Solo Ferroviario (Sandifod), Fedeguayas (Ramón Unamuno), L.D. Universitaria (FEDER) y la Espol (Campus de la Politécnica) tienen un estadio.
“Desde hace un año se venía estudiando la posibilidad de inscribirnos como Guayaquil FC. El proyecto del ‘presi’ Viteri me interesó y por eso estoy acá”, comentó el también ex entrenador de Liga de Portoviejo, Municipal de Cañar y la Sub 20 de Emelec en la temporada 2001.
La competencia entregará dos cupos para intervenir en el regional sur, luego el primero de cada grupo en ese zonal accederá al hexagonal final en el que los dos primeros se harán acreedores al boleto para disputar la serie “B” la temporada venidera.
“El equipo tiene jugadores capaces para cumplir el objetivo que pide la directiva. Lo que falta es pulir la estrategia. Soy un DT al que le gusta jugar con el balón pegado a los pies”, destacó Mendoza, “pero exijo precisión a todos los integrantes del equipo”.
Para el timonel de los “guayacos”, el certamen de segunda en la provincia “albiceleste” es uno de los más difíciles, puesto que hay 18 equipos que pugnan por clasificar al zonal de ascenso para pelear uno de los cupos a la “B”.
“Guayas es uno de los que más clubes tiene en su campeonato, por eso la dificultad para pelear por subir de categoría. Pero a pesar de todo, estoy seguro de que esta plantilla tiene la capacidad para lograrlo”.
Entre otros elencos, protagonistas del certamen de segunda, constan: Estudiante del Guayas, Panamá, Calvi, Patria, Alfaro Moreno, Paladin’s, Everest, Norteamérica, Sur y Norte y Don Café.
“El entusiasmo para este año es grande. Estoy convencido de que esta temporada el equipo va a reventar”, apuntó Diego Banega, estratega de Panamá, quien cuenta además su trayectoria como jugador y entrenador en el país.
“Soy de Argentina. Hice las inferiores en Independiente de Avellaneda. Hace 11 años me trajo a Ecuador (Carlos) Mendoza. Jugué en Técnico U. el 2000 y después pasé a Panamá. Me dediqué a dirigir desde el 2007”.
La característica del adiestrador “gaucho” es jugar con línea de tres en el fondo, aunque dice tener jugadores que se adaptan para formar cuatro defensores. “Me gusta tener el balón. Pongo futbolistas claves para que me manejen las líneas, no me complico mucho con los sistemas tácticos”.
Banega tendrá a su disposición a dos jóvenes talentos que se fueron a probar a Argentina y llegaron con un conocimiento “bárbaro”.
“El elenco ‘panamito’ tiene a Moisés Corozo, quien se mostró en River Plate y Lanús; además, a Javier Tarcopa, que entrenó con Racing de Avellaneda y River. “Ambos son nuestra esperanza”, recalcó.
Estudiante del Guayas es otro plantel que cuenta con un “sabio” en el banquillo: Carlos Núñez. El DT ecuatoriano asegura que en su equipo no existen las estrellas. “Tengo jóvenes no mayores de 23 años que juegan fútbol por amor y no por dinero. Eso es lo que más destaco de mis dirigidos”.