El suizo Roger Federer, cabeza de serie número uno, y el británico Andy Murray, tercero, comenzaron su andadura en el Abierto de Estados Unidos, el último del Grand Slam, con triunfos fáciles ante el local Donald Young y el ruso Alex Bogomolov, respectivamente.

Federer no tuvo que hacer mucho esfuerzo en el partido estelar de la sesión de noche, que se disputó en la pista central Arthur Ashe Stadium, y ganó 6-3, 6-2 y 6-4 a Young, que recibió el apoyo del público local, pero nada pudo hacer ante la superioridad del suizo que llega más seguro que nunca de su juego y rendimiento.

El número uno del mundo, de 31 años, sólo necesitó una hora y 34 minutos para dejar constancia que está dispuesto desde el principio a no gastar demasiadas energías de cara a luchar con garantías por el que sería su sexto título del Abierto de Estados Unidos, que no gana desde el 2008.

Federer consiguió siete saques directos y 27 golpes ganadores, además de tener un 83 por ciento de acierto con el primer saque. Su rival en la segunda ronda será el alemán Bjorn Phau, que ganó al belga Maxime Authom por 6-2, 4-6, 6-4 y 7-6 (9-7).

Por su parte, Murray, reciente medalla de oro en los Juegos Olímpicos, tampoco le dio ninguna opción a un rival que fue siempre inferior y no tuvo recursos para aguantar el ritmo del tenista escocés.

La ruptura del saque en los dos primeros sets no fue impedimento para que Murray consiguiese ganar fácil por 6-2, 6-4 y 6-1 a Bogomolov, que el año pasado renunció a la nacionalidad estadounidense y ahora tiene la rusa.

Murray, finalista del último Wimbledon, neutralizó el saque de Bogomolov y se lo quebró nueve veces, abriendo el camino del triunfo. "Si le pongo una nota al partido, le daría un seis o siete sobre 10", declaró Murray.

El escocés tendrá como rival en la segunda ronda al croata Ivan Dodig, que arrolló al japonés Hiroki Moriya por de 6-0, 6-1 y 6-2.