Enderica gana e iguala el récord de Gregory Fuentes
Las poderosas brazadas del nadador azuayo Iván Enderica lo llevaron a ser el ganador absoluto de la edición 51 del Cruce al Lago San Pablo, escenificada ayer como punto culminante de las Fiestas del Yamor, en la ciudad de Otavalo.
Con un tiempo de 41 minutos y 11 segundos, el cuencano logró su sexta victoria consecutiva e igualó el récord del guayaquileño Gregory Fuentes, aún cuando no mejoró su propia marca de 39:43, obtenida en la travesía de 2010, sobre los 3.515 metros del recorrido natatorio. En damas, el triunfo le correspondió a la también cuencana María Augusta Serrano, que registró un crono de 45:06.
Las frías aguas del escenario lacustre, ubicado a las faldas del volcán Imbabura, recibieron a 223 competidores de distintas provincias del país. Los ejercicios calisténicos realizados por los deportistas antes de la hora de partida (08:30) prendieron el ambiente festivo que se vivió en el acogedor cantón imbabureño.
Unas nubes negras que se dibujaron sobre el escenario en las primeras horas de la mañana se disiparon con el correr de los minutos, a la par de la aparición del astro rey, mientras los nadadores, con el nerviosismo propio de la competencia, recibían las últimas instrucciones de sus entrenadores, a la espera del disparo de salida.
Tras la señal, los nadadores salieron desde el muelle metálico del Puerto Araque. Los botes asignados para distintas misiones tomaron posición unos metros delante del muelle para seguir muy de cerca el desarrollo del evento. Recorridos los primeros 100 metros, cuatro nadadores desistieron de su intento y optaron por el retiro, dada la temperatura del agua que osciló entre los 16 y 17 grados.
Mientras tanto, Iván Enderica ya había tomado unos diez metros de ventaja, transcurridos 10 minutos. Atrás y con un ritmo sostenido le presionaban Santiago Enderica, Miguel Armijos y Esteban Enderica quienes miraron en su momento al bote guía con bandera amarilla, para no perder el sentido de orientación.
El viento comenzó a agitar las aguas, pero Iván, con un promedio de 75 brazadas por minuto y con un estilo crol muy depurado en posición ventral, con un movimiento sincronizado de sus brazos y piernas, se mantenía a la vanguardia del grupo.
La nadadora cuencana María Augusta Serrano, no perdía de vista a los varones y les seguía muy de cerca; de su parte Iván, cada tres y cuatro brazadas, tomaba aire para llenar sus pulmones.
Recorrida la mitad de la distancia, la diferencia con sus inmediatos perseguidores, que perdieron momentáneamente su línea de natación y el punto de referencia (bote guía), se amplió a 150 metros. De ahí en más, Enderica no tuvo mayor presión, pero no perdió concentración ni el ritmo de sus brazadas y solitario arribó al muelle Costa Azul, en donde tocó con su mano diestra la alfombra colgante instalada para que los nadadores tomen contacto con sus chips, sistema de control de tiempo que por vez primera se puso en práctica en esta nueva travesía.
“La verdad es que estoy muy contento al lograr una nueva victoria. Esta es mi primera competencia luego de los Juegos Olímpicos, he tenido apenas unos 15 días para entrenar, pero el resultado es bueno para el futuro. No vine con el propósito de mejorar mi marca anterior ni establecer un nuevo récord, solo para lograr mi sexta victoria consecutiva. Gracias a Dios mi estrategia de ponerme al frente desde el principio me sirvió y pude ganar”, manifestó Iván.
Un total de 5.900 dólares se repartieron entre los ganadores en las distintas categorías de la competencia. Como ganador de la general, Iván Enderica recibió un cheque por la suma de 1.200 dólares. (FMR)