La lluvia de 12 horas que cayó desde la noche del viernes y parte de la madrugada de ayer sobre la capital manabita, Portoviejo, no fue obstáculo para que la afición del Manta  y de Emelec asistan al escenario del Reales Tamarindos, para observar el partido de la tercera fecha del torneo ecuatoriano, que terminó sin goles.

La fuerte lluvia caída en Manabí no fue impedimento para que cientos de hinchas se hagan presentes  horas antes del cotejo. A muchos, como José Mieles, no les importó llenarse de lodo o mojarse. El hincha azul llegó al Reales Tamarindos a las nueve y media de la mañana con sus tres hijos para observar al equipo de sus amores, Emelec.

“Soy azul desde siempre. He estado en algunas finales de torneo apoyando a mi equipo y mis hijos también son muy fanáticos del equipo”, confesaba Pepe como lo conocen sus amigos del sector Charapotó, sitio aledaño a Portoviejo.

Por su parte, Katty Dueñas, de 24 años, y su esposo, Otto Morales, también llegaron con banderas de Emelec y sus infaltables camisetas para alentar al equipo de sus amores. “Soy una emelecista de corazón y aquí en Manabí, Emelec siempre ha mandado por la gran cantidad de hinchada que tiene”.

En cuanto a los hinchas del Manta, varios buses llenos de fanáticos “atuneros” llegaron desde el puerto manabita hasta Portoviejo para apoyar a los celestes.

En cuanto al partido, este se desarrolló en medio de una cancha fangosa, que no prestó las condiciones para que dentro de los 90 minutos ambos elencos jugaran a ras de piso.

Emelec fue más práctico y equilibrado durante la primera media hora de juego con llegadas por los costados y centros al área por parte del mejor jugador que tuvieron los azules: Enner Valencia. Sin embargo, las micro-sociedades entre Mondaini, Iza y de Jesús no se hicieron notar en la primera parte. Mientras tanto, el Manta se dedicó a contragolpear.

Cristian Márquez y Jefferson Cuéllar, por momentos dieron problemas a la zaga emelecista con varias jugadas de peligro. Cuéllar no pudo efectivizar, al término del primer tiempo, la opción más clara de gol para su equipo.

Para la segunda etapa el panorama futbolístico no cambió en gran medida, debido a la incesante lluvia que se hizo presente antes de la media hora de juego.

Debido al mal estado de la cancha, el lateral izquierdo “eléctrico”, Óscar Bagüí (distensión muscular), y el capitán, Pedro Quiñónez (golpe en la rodilla), salieron lesionados.

Con este empate, Emelec sumó 7 puntos y más 3 de gol diferencia, mientras que el  Manta alcanzó 4 unidades.