La alegría que generó el apurado triunfo sobre Liga de Loja el pasado domingo duró poco para Emelec. Dos horas después de finalizado el partido, el equipo “eléctrico” viajó a Brasil para su encuentro de vuelta por los octavos de final de la Copa Libertadores ante Fluminense.

Los “eléctricos” viajaron en un vuelo comercial, por lo que la travesía fue larga. Su primer destino fue Lima (Perú), donde hicieron una escala de dos horas y luego tomaron otro avión que los llevó hasta suelo brasileño. Llegaron aproximadamente a las 24:30 (hora ecuatoriana) y se hospedaron en el hotel Bourbon de Río de Janeiro.

Los “millonarios” se medirán  mañana a las 20:00 al “Flu”  en el estadio Saö Januario (perteneciente al Vasco Da Gama) debido a que el Maracaná, donde hace de local, sigue en proceso de remodelación previo a la Copa Confederaciones que se realizará en junio próximo.

Después de unas horas de descanso empezaron los entrenamientos de la tarde  (17:00 hora ecuatoriana) en el complejo del “archirrival” del equipo “tricolor”, el Flamengo. También se espera poder hacer el reconocimiento del campo del Saö Januario esta tarde. La mayor novedad del conjunto dirigido por Gustavo Quinteros es el regreso de la dupla titular de centrales, ya que Gabriel Achilier y Cristian Nasuti cumplieron con su partido de suspensión y  serán considerados por Quinteros.

Además, Polo Wila también podría regresar a la titularidad, con lo que el entrenador argentino-boliviano volvería a poner en el campo, luego de algunos encuentros, el equipo ideal que él considera ideal.

Emelec nunca ha vencido a un equipo brasileño en condición de visitante en la Copa Libertadores y en la actual edición de la competencia tan solo logró un punto fuera de Ecuador, que fue contra Vélez en Liniers (Argentina), en la última fecha de la fase de grupos.

Un empate (cualquiera que sea el marcador) o una victoria de visitante clasificarían al vicecampeón ecuatoriano a la siguiente ronda de la Libertadores. Si pierde por un gol de diferencia y anota, también pasaría (excepto con el 2-1). Si fuera por 1-0, el elenco brasileño sería el clasificado a la siguiente fase, por el gol de visitante hecho en Guayaquil. Con un 2-1 a favor del equipo local el partido se iría a la tanda de penales para su definición.

El “Flu” viene de perder el pasado domingo la final del “Taça Rio” (Trofeo de Río) que corresponde a la segunda ronda del torneo carioca brasileño. El Botafogo, donde juega Clearence Seedorf, venció por 1-0 a los “tricolores”,  que fijan su mirada en Copa Libertadores, su objetivo principal en esta parte del año.

Abel Braga, técnico del equipo brasileño, se muestra preocupado ya que debe buscar al centrodelantero ideal que sustituya a  Fred, que no jugó en Guayaquil. El atacante se recuperó de una lesión, pero todavía no está listo  para jugar noventa minutos, por lo que será suplente.

Rafael Sobis, su principal reemplazante, no estuvo ante el Botafogo por una lesión muscular y es duda para mañana. Suena como alternativa Thiago Neves como referente de área, pero no viene jugando como titular en el conjunto “tricolor”.

Braga ya viró la página de la derrota en la final del “Taça Rio” y mira con esperanza el duelo de vuelta de los octavos de final.

“Ustedes tienen que dar vuelta a la página, fue lo que les dije a los jugadores. Por supuesto nos molesta la pérdida del título, pero Botafogo lo merecía. El miércoles (mañana) es el juego del honor, necesitamos el apoyo de los fans y yo sé que lo tenemos”, dijo el adiestrador brasileño, que ya ganó la Copa Libertadores en el año 2006 al mando del Internacional de Porto Alegre.