El “Mariscal” todavía mueve a los “soldados”
El club mexicano América y la selección de Paraguay empataron 0-0 el miércoles en partido de homenaje al delantero Salvador Cabañas y en el que Francisco Arce debutó como DT del combinado “guaraní”.
La presencia del “Chiqui” Arce, relevo de Gerardo Martino en la banca de la “albirroja”, quedó en segundo plano ante el reencuentro de Cabañas con las aproximadamente 30.000 personas que se dieron cita en el estadio Azteca.
Aunque jugado en fecha FIFA, este compromiso entre América y Paraguay quedó marcado especialmente por el gesto que los futbolistas tuvieron con Cabañas, ya que instantes antes del partido vistieron unas casacas con su rostro y su apellido impresos, además del número 10 en el dorsal.
Asimismo, las casacas incluían la leyenda “ipora” (estoy bien), palabra guaraní que Cabañas pronunció días después de recibir el balazo en la cabeza en enero de 2010 al despertar de un coma inducido.
En los instantes previos al partido, el uruguayo Vicente Sánchez, capitán de las Águilas americanistas, cedió el gafete a Cabañas quien, antes de dar el puntapié inicial, le dijo al brasileño Adolfo Rosinei: “como delantero, si tienes una oportunidad, tiene que ser gol”.
El partido comenzó y en los primeros momentos los americanistas tocaron la pelota con Cabañas, quien sólo intentó un remate al arco. Fue un disparo con el botín derecho desde fuera del área que se fue encima de la portería defendida por el arquero Joel Silva al minuto 9.
De inmediato Cabañas salió del campo y fue sustituido por Juan Carlos Medina, para luego ir a la banca americanista donde se pasó el resto del primer tiempo bromeando con el argentino Daniel Montenegro.
En el descanso el ídolo paraguayo dio una vuelta alrededor de la cancha para saludar a los aficionados reunidos en el estadio Azteca. En la segunda mitad, Cabañas reapareció en la cancha, ahora con la camiseta paraguaya, para jugar otros 10 minutos.
Como en el primer tiempo, “Chava” sacó un disparo de media distancia que se fue arriba del arco del guardameta Hugo González. Inmediatamente después, al 56, salió de cambio por Robin Ramírez.
“Esto es muy lindo para mí y para toda mi familia. Agradezco a los americanistas todo el cariño que me dieron en las buenas y en las malas”, dijo Cabañas en entrevista para la televisión al abandonar la cancha.
En enero de 2010 el paraguayo, que fue mundialista con su país en Alemania-2006, recibió un disparo en el baño de un club nocturno del sur de Ciudad de México, tras lo que aparentemente fue una discusión entre él y un hombre presuntamente ligado con el narcotráfico.
El paraguayo sobrevivió al disparo pero tuvo que abandonar la práctica del fútbol profesional y el proyectil sigue alojado en su nuca.
En días pasados Cabañas informó que ya ha declarado ante las autoridades mexicanas y reconocido al sujeto que le disparó en la cabeza, identificado como José Jorge Balderas, alías JJ, actualmente sujeto a proceso en prisión.
“Entré al baño y de repente una persona ya estaba apuntándome en la cabeza con la pistola, me insultó y todo. Lo recuerdo perfectamente, no me puedo olvidar de la cara, la tengo siempre en mi mente”, dijo. Cabañas consideró que aunque la vida es hoy “un poco distinta”, sigue siendo la misma persona.