El fútbol femenino busca autogestión
El primer Campeonato Nacional de Fútbol Femenino tendrá como objetivo principal sentar las bases de la estructura del balompié para mujeres; la profesionalización vendrá en lo posterior.
Si bien el Ministerio del Deporte costeará los gastos más significativos de los 16 equipos participantes y la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) aportará el aval y solventará el ámbito reglamentario, algunos gastos tendrán que ser asumidos por los clubes. (ver cuadro ampliado grupos y calendarios de juegos)
El Ministerio invertirá 189.198 dólares en uniformes, indumentaria, alimentación, alojamiento, movilización de los conjuntos para sus cotejos en condición de visitantes, honorarios de las ternas arbitrales, vocalía, gastos de camerino, papelería y sueldo del director técnico.
Los elencos deberán cancelar la movilización interna de las deportistas, la hidratación, los haberes del resto de integrantes de los cuerpos técnicos (preparador físico, médico, utilero). El pago del cuarto árbitro corre por cuenta del club local.
Por estos motivos, Amílcar Mantilla, presidente de la Comisión Nacional de Fútbol Amateur (Confa) de la FEF, manifestó la necesidad de que los clubes emprendan estrategias de autogestión. La misma Confa requiere auspiciantes para la organización del torneo.
¿Sueldos para las jugadoras?
Es potestad de cada representativo otorgar algún reconocimiento económico a las jugadoras. Todo dependerá de los fondos y políticas propias que manejen.
Miguel Ortega, directivo del Rocafuerte de Guayaquil, expresó que esta entidad baraja la posibilidad de entregar dinero a sus futbolistas, “aunque sean valores simbólicos”. Se espera contar con el financiamiento de auspiciantes y definir la figura legal de la transacción. Incluso se analiza afiliarlas al Seguro Social.
Por ahora, el club cuenta con el respaldo de la cementera Holcim, tiene -además- el apoyo de la marca de bebidas Gatorade, que se encarga de la hidratación de las chicas durante las prácticas.
Los cotejos se jugarán con dos tiempos de 45 minutos. Cada club podrá efectuar cinco cambiosSusana Jara, directora de deportes del Club Universidad San Francisco de Quito (USFQ), quien no está de acuerdo con la idea de pagar a las deportistas en este certamen, manifestó que lo primero es consolidar la estructura del balompié femenino, subir el nivel deportivo y, con el tiempo, profesionalizarlo.
En la USFQ se opta por mantener el espíritu amateur de las futbolistas, de jugar por amor a la camiseta. Esa entrega se premiará con incentivos, como becas. A ello se añadirán los servicios de un cuerpo técnico completo y la implementación necesaria.
Los rubros que no consten en el presupuesto dado por el Ministerio del Deporte se cubrirían con aportes de auspiciantes y con las taquillas, pues se piensa cobrar una cantidad mínima en sus programaciones en calidad de local.
A su turno, Antonio Muñoz, directivo de Cruz del Sur de Tena, señaló que también necesitan patrocinadores. No sabe si podrán otorgar dinero a las chicas, pero considera que no estaría mal darles algún tipo de estímulo.
Livishtong Otero, gerente de La Troncal Unida, opinó que es preferible no comprometerse a cancelar salarios porque los egresos para sostener el equipo de varones que incursiona en la segunda categoría, así como los de las divisiones formativas, no dan margen para ello.
Respecto a los pases, en el fútbol amateur las jugadoras son libres, aunque, para muchos directivos, al momento de ser registradas por un club, pasan a convertirse en patrimonio de la institución. Todo dependerá de los acuerdos a los que lleguen los equipos.