El Estado francés suspendió todas las competiciones deportivas previstas este fin de semana en Ile-de-France, la región de París, tras los atentados en la capital gala que causaron al menos 127 muertos, una medida que se extiende al conjunto del territorio para algunas federaciones y organizaciones.

El sábado, la Secretaría de Estado de Deportes anunció la prohibición decidida durante la noche por el comité interministerial de crisis y solo concernía a las manifestaciones, profesionales y amateurs previstas en París y en los departamentos de la región parisina.

Un poco más tarde, las federaciones francesas de voleibol, de baloncesto, de hockey sobre hielo iban más allá, anulando todos los partidos amateurs y profesionales previstos en el conjunto del territorio.

Por su parte, el EPCR (European Professional Club Rugby) anunciaba el aplazamiento de todos los partidos de Copa de Europa y del Challenge europeo de rugby previstos en Francia el sábado y el domingo, es decir Racing 92-Glasgow y Oyonnax-Ulster, que debían jugarse el sábado, así como Bordeaux-Bègles - Clermont y Toulon-Bath, inicialmente previstos el domingo.

La ciudad de Burdeos había anticipado la medida anulando el partido previsto en su suelo, así como el Trofeo Bompard de patinaje artístico.

En el Challenge europeo, Pau-Castres, que debía tener lugar el sábado, también fue aplazado a una fecha posterior.

En lo que concierne a los partidos anulados en Ile-de-France, destaca el duelo de balonmano PSG - Tremblay-en-France.

Fútbol y rugby

Ningún partido de la primera y segunda división de fútbol (L1 y L2) o de rugby (Top 14) estaba previsto este fin de semana.

En cambio, en la séptima ronda de la Copa de Francia de fútbol había partidos en Sannois-St-Gratien, Versailles, Brétigny y Mantes-la-jolie. En Liga A de voleibol, París debía albergar a Lyon en el Estadio Charletty, por lo que todos fueron anulados.

Unas horas después de los ataques terroristas, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, había anunciado el cierre de los lugares públicos de la ciudad, en particular los gimnasios y piscinas.

Sin esperar la consigna del Estado, varios clubes aficionados ya habían prevenido a sus miembros la anulación de las competiciones y torneos programados en Ile-de-France.

Interrogado por la AFP, el presidente del Comité Olímpico Francés (CNOSF), Denis Masseglia, había estimado que una suspensión de las competiciones deportivas a nivel nacional habría "dado la razón a los que siembran el terror".

Ni el secretario de Estado de los Deportes, Thierry Braillard, ni su ministro, Patrick Kanner, comentaron la medida, ya que la comunicación sobre los ataques terroristas en París estaban reservados al presidente de la República y al Primer ministro.

Los atentados causaron al menos 127 muertos el viernes. El primero fue perpetrado cerca del Estadio de Francia durante el partido amistoso de fútbol Francia-Alemania, mientras que el resto tuvo lugar el centro de París, el más mortífero en el Bataclan, que causó al menos 82 víctimas. (I)