Las lesiones de jugadores como Déison Méndez (rotura del tendón de Aquiles) y  Giovanny Caicedo (rotura del tendón rotuliano), en Deportivo Cuenca, permitieron que a Gregory González se le abrieran las puertas en la titularidad del equipo.  

El polifuncional esmeraldeño, pues oficia de lateral por derecha, zaguero central y volante de primera línea, se ganó la confianza del estratega de los “Camisetas Coloradas” desde la fecha 13  del torneo, cuando enfrentó a El Nacional en el Alejandro Serrano. Antes fue irregular. 

“Nunca perdí la fe de ser dueño del puesto, siempre me mantuve trabajando con las mismas ganas porque sé que esto es así; en cualquier momento se te dan las oportunidades y si no las aprovechas las pierdes”.

Ante los “Puros Criollos”, Gregory saltó como inicialista en el centro de la  zaga y contribuyó a que la escuadra obtuviera los tres puntos.

Su buena “performance” en este compromiso cautivó al entrenador argentino, Luis Soler, quien no lo ha movido de esa posición ante Técnico U., Emelec, Liga de Quito y Manta;  todo lo contrario,  ha dotado de confianza al “Tractor”  para que éste se afiance en el centro de la zaga.

“El ‘profe’ Soler enseña muchas cosas que aprovecho para mejorar. Por suerte,  este año las cosas se me están dando y sobre todo he alcanzado el nivel que persigo desde hace mucho”.    

La jornada 15 de esta etapa, según González, fue la más especial para él, pues al minuto 26  le marcó un gol a Emelec en el estadio Modelo. Pese a que el resultado no fue favorable para los “Colorados”- perdieron 2 a 1-, esa diana le representó mucho al deportista de 1,82 de estatura, por la importancia del rival y por su pasado barcelonista.

“Lo festejé con mucha alegría, lástima que no sirvió para sumar tres puntos porque así hubiese sido mejor. Creo que marcarle a Emelec es muy importante siempre. Cuando estuve en las inferiores de Barcelona  tenía buenas presentaciones ante ellos”.     

El  pasado en el equipo más popular del fútbol ecuatoriano es algo que  guarda en un rincón muy especial. Llegó a Barcelona a  inicios de 2006, para jugar en la Sub 19, con la que actuó en 33 partidos. En 2007 y 2008 realizó la pretemporada con el equipo principal, pero no logró quedarse y retornó a la Sub 20.

El 2009 fue el año de su aparición en el profesionalismo con el “Ídolo del Astillero”, que en esa época inició el proyecto denominado “La Renovación”, con el director técnico español Benito Floro al mando.

“El entrenador (Benito Floro) fue alguien especial para mí. Con él aprendí muchas cosas, como salir jugando rápidamente y con precisión desde atrás. Aquí (en el Cuenca) el ‘profe’ (Soler) tiene un método parecido de dirigir”.

Para el partido de hoy (19:00) ante el Quito (séptimo), en el Atahualpa, Gregory comandará el centro de la zaga del Cuenca (quinto). El esmeraldeño  espera aprovechar que los “chullas” recién inician un proyecto nuevo bajo la batuta de Nelson Acosta, quien debuta hoy en el banquillo, quien aseguró:  “Acá (en Ecuador) se juega a veces muy tranquilo, a mí me gusta otra dinámica y otra presión”.