A muchos hinchas ecuatorianos no les gustó el cambio que hizo Reinaldo Rueda cuando inició la segunda etapa del cotejo entre Ecuador y Perú, que se jugó el martes pasado en Quito. El estratega colombiano disponía el ingreso de Édison Méndez por un  Joao Rojas que había hecho un buen primer tiempo y los aficionados guayaquileños, que observaron el partido en varias partes de la ciudad, criticaron el cambio del técnico “cafetero”.

Muchos emitían comentarios negativos sobre este hecho: “Rojas estaba jugando bien, no entiendo por qué lo cambian”, dijo un hincha que observó el partido en un parque de  Sauces IV, donde se instaló una pantalla gigante.

Pero al minuto 69, cuando llegó el primer gol de Ecuador, por intermedio de “Kinito” Méndez, los comentarios negativos hacia el volante de Emelec cambiaron por completo.

“No pensé que el ingreso de Méndez le haría mejor al juego de Ecuador”, sostuvo John Martínez, quien también vio el partido en Sauces IV.

Por su parte, Méndez, quien retornó ayer a los entrenamientos con el “Ballet”, confesó que cuando el ‘profe’ Rueda le indicó que ingresaría en el segundo tiempo, de inmediato se encomendó a Dios y le pidió que le diera fuerzas para poder aportar de buena manera a la “Tri”.

“El cotejo estaba complicado, Perú se defendió muy bien, pero gracias a Dios el equipo en la segunda parte pudo encontrar la manera de superar la marca peruana y por suerte logré anotar la primera para Ecuador”, comentó el volante.

Pese a que su ingreso  le cambió la cara al partido, Méndez sostuvo que no se siente como un héroe, sino como un jugador más que estuvo en el momento indicado. “Los muchachos hicieron un gran partido, se buscó en todo momento el arco contrario y al final  pudimos meter dos goles que nos dan algo de tranquilidad en las eliminatorias”.

Asimismo, el volante de Emelec comentó que lo importante es que el país pudo sumar tres puntos en condición de local y eso es favorable para pensar en la clasificación al Mundial de Brasil 2014.

“En las otras eliminatorias en las que pudimos clasificar al Mundial de Corea y Japón 2002 y al de Alemania 2006, nuestro trabajo fue ganar la mayoría de cotejos en casa. Este año hemos empezado muy bien y ojalá que en los próximos cotejos los resultados sean favorables tanto de locales como de visitantes”, comentó.

Sobre el enfrentamiento verbal que tuvo el “Kinito”, cuando el cotejo terminó, con Jefferson Farfán (ex compañero de Méndez en el PSV de Holanda), Méndez indicó que nunca lo insultó.

“Solo me acerqué para saludarlo, pero no me di cuenta de que él estaba muy enojado conmigo. Luego de eso conversé con él (Farfán) y quedó todo bien, seguimos siendo amigos. Son cosas que pasan”.

Por otra parte, el volante azul expresó que la preocupación por los partidos de eliminatorias ya pasó y que ahora solo le toca enfocarse en la culminación del torneo nacional y en el Clásico del Astillero ante Barcelona (sábado 16:00).

“Los partidos clasificatorios a Brasil 2014 terminaron y ahora todos retornamos al campeonato. Tenemos un compromiso importante este sábado y solo me toca trabajar para estar listo cuando el ‘profe’ lo requiera”, afirmó.
Por su parte, el DT Reinaldo Rueda resaltó el orden y la paciencia que tuvo la “Tricolor” para lograr el triunfo frente a Perú. “En la medida que pasaba el partido, nos precipitamos un poco y caímos en la ansiedad y la imprecisión, pero el grupo siempre tuvo la convicción de lo que había que hacer y llegaron los goles”, comentó.

El colombiano también se refirió a la variante que cambió el trámite del partido, con el ingreso de  Méndez en lugar de Rojas.

“Esa fue una lotería que a veces se gana. O era abrir el partido con Édison para tener manejo y colectividad, o abrir el partido con Joao que nos da amplitud de cancha. Era preferible tener el control del partido a tener vértigo y esa apuesta sirvió para mejorar”.

Mientras que el DT de Perú, el  uruguayo Sergio Markarián, afirmó que la altura fue un tema determinante en el cotejo, pero añadió que el local ganó bien. “Sabíamos que los segundos tiempos serían difíciles. Creo que la altura pesó mucho.   Ecuador juega bien en Quito y nos preparamos  para esto. Estuvieron  bien todos, pero Ecuador nos ganó bien y respetamos el resultado”.

La hinchada ecuatoriana también fue paciente, como lo fue el equipo dentro de la cancha. Algunos esperaron desde las 12:00 en los graderíos y otros llegaron sobre la hora, pero cuando inició el partido dieron su aliento desde el primer minuto. En total asistieron 34.481 y dejaron una recaudación de $898.493.

En la quinta jornada, que se disputará el 2 y 3 de junio, Ecuador visitará a Argentina en Buenos Aires, y en la sexta, el 9 o 10 de junio, la “Tri” será local ante Colombia. Previo a esos partidos Rueda planea varios microciclos y aprovechar la fecha FIFA de febrero para reunir a  los seleccionados.