Solo el 50% de las 24 provincias ecuatorianas tiene una pared idónea para la práctica de la escalada deportiva, mas  no todas cuentan con una actividad constante.  

Tungurahua, que es la sede actual de los IV Juegos Nacionales Prejuveniles, que finalizarán mañana, pese a que tiene un muro, éste no reúne las condiciones técnicas.

“La pared no es la reglamentaria ni para los entrenamientos, ya que la posición es semihorizontal, inclinada, no empieza de abajo hacia arriba sino viceversa y no cumple los mínimos requerimientos exigidos, incluso ni de seguridad”, refirió Ángel Sisalema, presidente de la Federación Deportiva de Tungurahua.

Por eso, los 15 escaladores de nivel de competencia que tiene esta provincia ensayan en la ciudad de Baños. Esa es la razón también para que esta disciplina en sus tres modalidades: velocidad, dificultad y boulder se cumpliera en Pichincha, donde los tungurahuenses no tuvieron representación.

Al momento existe un ofrecimiento del Ministerio del Deporte para dotar a esta provincia de un nuevo muro para masificar esta disciplina.

La provincia del Chimborazo también cuenta con una pared de entrenamiento, pero la estructura está muy desgastada y se hace peligroso para los deportistas.

La ciudad del Puyo (Pastaza) cuenta con la infraestructura más reciente, pero no tiene la cobertura necesaria para protegerla de condiciones propias del ambiente.

Solo las provincias de Cañar, Azuay, Bolívar, Cotopaxi, Los Ríos, Guayas, Manabí, Pichincha e Imbabura poseen estructuras sólidas que permiten a las dos últimas ser las referentes en esta disciplina.   

Los Ríos y Cotopaxi cuentan con un mínimo de deportistas en escalada, por lo que su participación en torneos nacionales es escasa. “Pese a los inconvenientes, Ecuador está en el top ten mundial”, dijo Fátima Arteaga, presidenta de  la FEDAN.

En Imbabura la dificultad mayor era la inclinación del muro. “Una parte era de 6º y la superior de 8º, lo que provocaba ritmos diferentes en el manejo del tren superior e inferior de los competidores y dificultaba el cumplimiento de un trabajo  óptimo, cuando lo oficial es 5º”, indicó el entrenador Eduardo Martínez.

Por eso los tres clasificados de esta provincia (Nicole Mejía, Josué Manosalvas y Esteban Yépez) quienes irán al Mundial en la modalidad de velocidad en Singapur en septiembre cumplirán alrededor de 25 días de trabajo en Europa. “En ninguna parte de Ecuador existe un muro con las condiciones de la porosidad de las paredes oficiales que facilitan la rapidez”.

De esa localidad salieron los representantes que alcanzaron cuatro de las cinco medallas internacionales. Gonzalo Mejía e Isaac Estévez en el 2007 lograron  las preseas de plata y bronce, respectivamente, en el mundial juvenil  de Ibarra.

En ese evento también alcanzó bronce el pichinchano Andrés Quinteros. Un año más tarde nuevamente Isaac logró plata y 12 meses después el bronce siempre en velocidad, la modalidad de mayor aceptación en la provincia de los Lagos. Se estima que el costo de mantenimiento del muro es de alrededor de 10 mil dólares anuales. (VNH)