Djokovic elogia a Nadal y éste imagina la revancha
Los denominados “4 Fantásticos” del tenis mundial no se fueron de Australia con las manos vacías. El vencedor del primer Grand Slam del año, el serbio Novak Djokovic, además de haberse quedado con el trofeo, recibió un cheque por 2,4 millones de dólares, mientras que Rafael Nadal se marchó de Melbourne con 1 millón 100 mil. Andy Murray y Roger Federer se quedaron con $436 mil.
El abierto australiano, que desde el año pasado repartió una cifra récord en la entrega de premios ($25 millones), le dio así al número uno del mundo un “motivo” más que anímico, para seguir en racha en esta temporada.
Y esto es solo el principio de año. A falta de confirmar las tarifas para el resto del calendario, Roland Garros repartió en el 2011 $17,5 millones de euros ($22,9). Wimbledon destinó 16,37 millones ($21,4) y el otro grande del 2011, US Open, tuvo una bolsa de 17,87 millones ($23,4).
Ante la buena remuneración, los organizadores de los 4 Grand Slam, se toman ciertos atrevimientos con los tenistas, como lo que le sucedió a “Nole”, que luego de haber terminado de jugar ante Nadal la madrugada (04:30) del lunes en Australia, fue levantado temprano (10:30) del mismo día para posar junto con su trofeo por algunas calles de Melbourne ante la mirada de la prensa y “fans”.
El número uno del mundo confesó que apenas pudo descansar después del histórico encuentro ante “Rafa”, ya que lo despertaron para la sesión de fotos de rigor del campeón.
“Dormí apenas un par de horas, pero fue suficiente”, dijo un relajado Djokovic, que a pesar del evidente cansancio no dejó de atender a las personas que lo rodearon para sacarle un autógrafo, una foto o simplemente regalarle un muñeco de peluche.
El serbio lució tan agotado como si aún tuviera en frente a Nadal, listo para ejecutar uno de sus golpes cargados de efectos. “Todo el esfuerzo que pusimos (con Nadal) en la cancha fue increíble; algo que recordaremos para siempre”, señaló “Nole”.
“Estamos dedicando nuestras vidas a este deporte para llegar a la situación de jugar un partido de seis horas para ganar un título de Grand Slam. Trabajamos todos los días para esto. Es decir, sufrimos un desgaste enorme, pero estamos felices con lo que hacemos”, indicó el serbio.
Djokovic, ya con los ojos rojos de cansancio, replicó sobre el cotejo con “Rafa”: “realmente creo que sí, es la victoria más importante de mi carrera. Ganar Wimbledon (2011) también lo fue, porque ése era el torneo con el que había soñado toda mi vida. Pero ganar la final de Grand Slam más larga de la historia (5 horas y 53 minutos)... me ha hecho llorar”.
El actual número 1 ATP tampoco se olvidó de su rival y comentó: “desgraciadamente no puede haber dos ganadores, pero ‘Rafa’ merecía ganar también esa noche”.
El mallorquín, precisamente, valoró su actuación en el abierto australiano pese a marcharse con una derrota en la final. “Después de un tiempo que he sufrido sin disfrutar, no tengo quejas: ayer (domingo) sufrí disfrutando.
Quizá la derrota duele menos porque he dado todo lo que podía. He competido de igual a igual con un jugador que, hoy en día, es brillante. Ahora viene la temporada más importante para mí, que es desde Indian Wells hasta Wimbledon”.
Cuestionado por los vaivenes del partido y las opciones que tuvo en el quinto set de ganar el “match”, Nadal indicó que “cualquier cosa pudo pasar, pero jugué contra un adversario que, estando cansado, genera golpes ganadores. Fallé esa bola del 30-15 para el 5-2, pero es un lance del juego y quedarme con esa bola sería injusto conmigo mismo”.
Pese a perder su séptima final consecutiva ante el serbio, el tenista español aseguró que “no busco ganar a Djokovic, sino superarme a mí mismo... y lo he hecho”.