En el istfq se recibe a bachilleres de toda especialidad, la edad no importa
Carlos Castro, un ‘soldadito’ que quiere ascender a técnico
Decir “presente” cuando pasan lista o presentar los deberes a los docentes le hicieron recordar instantes de la adolescencia. Hasta hace poco, la cotidianidad de Carlos Castro (35 años) se resumía entre las actividades familiares y los entrenamientos, ahora las clases en el Instituto Superior Tecnológico de Fútbol de Quito (ISTFQ) son parte importante de su vida. El 28 de este mes, el ‘Soldadito’ y sus compañeros de salón concluirán el segundo de los 6 semestres que deben aprobar para recibirse de directores técnicos.
“No hay nada más lindo que hacer lo que más te gusta, poniéndole ganas y empeño para ir reforzando los conocimientos. Estoy dispuesto a emprender este nuevo camino cuando sea la hora de colgar los botines”, aseguró.
Pero el defensa, que se estrenó en el balompié de primera en 1998 con la camiseta de Aucas no se apura, siente que todavía no es momento de retirarse. De hecho, el pasado fin de semana debutó en el club Universidad Internacional del Ecuador (UIDE), que participa en la segunda categoría de Pichincha. El horario de prácticas le favorece, pues es de 15:00 a 17:00; eso le permite acudir a tiempo a las lecciones del instituto, que son de 18:00 a 22:30.
Además de técnica y estrategia, en el ISTFQ se instruye en fisiología, psicología, preparación física, etc.
1.225 dólares cuesta el semestre. Las clases se imparten en la Casa de la Selección. El rector del ISTFQ es Byron Rodríguez.Aunque considera importantes todas las materias, la que más le gusta es técnica y estrategia, a cargo de Edwin Cózar, director de la carrera y profesional de amplia trayectoria en la preparación física y en la orientación técnica.
“Al profesor Cózar trato de sacarle provecho, tanto en el aula como en la cancha. También me esmero con los otros maestros, aunque admito que volver a las aulas fue difícil al principio”, comentó. Castro, quien se graduó de bachiller en ciencias sociales hace 17 años en el colegio Remigio Geo Gómez Guerrero, de Huaquillas (El Oro) y militó en Aucas, El Nacional, Barcelona, Deportivo Cuenca y Deportivo Quevedo, desea concluir su instrucción dentro de 4 semestres y tener algún día un elenco que exhiba un juego vistoso y ofensivo como el del Barcelona de España.
Aunque no tan conocidos como el ‘Soldadito’, el resto de estudiantes también anhela conquistar la gloria desde el banquillo y la zona técnica.
Jorge Loaiza (20 años) llegó desde Loja para enlistarse en el ISTFQ. Su propósito es convertirse en el mejor DT del país. Seguidor de la disciplina del imbabureño Carlos Sevilla y de la eficacia del español Josep Guardiola, está convencido de que en Ecuador hay capacidad para triunfar a nivel mundial. “A mí me gustaría dirigir a Liga de Loja y a la selección nacional. En mi opinión, a los técnicos ecuatorianos no les falta nada, pero lamentablemente, por la idiosincrasia de nuestra gente, se cree que el entrenador nacional no sirve”, reflexionó.
Empero, las ambiciones de los aspirantes no se restringen únicamente a las lides de alto rendimiento. Paúl Córdova (32 años), por ejemplo, encontró su principal motivación en los campeonatos estudiantiles. Cree que, con el trabajo adecuado, las escuelas y colegios se convertirían en verdaderas canteras. Para ello se necesitan profesionales en la dirección técnica.
Córdova es tecnólogo en sistemas graduado en la Escuela Politécnica del Ejército (ESPE), pero siempre quiso ser futbolista. Dejó las formativas de El Nacional por priorizar los estudios académicos. Esa frustración espera ‘curarla’ en calidad de timonel, enfocado en el descubrimiento de noveles talentos.
Carlos León, Álvaro Carcelén, Francisco Correa y Pablo Amaya son algunos exfutbolistas que han pasado por las aulas del Instituto.
Rompiendo mitos
Entre los 180 alumnos del establecimiento hay cuatro mujeres. Ellas viven a contracorriente con el afán de ganarse un espacio en el ‘redondo’ mundo de la pelota. Mabel Velarde (25 años), quien fundó su propia academia de fútbol para enseñar sus conocimientos, en especial a chicas, manifestó que poco a poco los varones ven con mayor respeto al balompié femenino. Incluso la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA) otorga más apoyo a los torneos de mujeres.
Mercedes Añamise (28 años), relacionista pública de deportes de la Universidad San Francisco de Quito, mencionó que la presencia de damas en el ente genera un cambio de mentalidad en los hombres. En la actualidad es asistente técnica del equipo masculino de la ESPE