Como una semana buena e inolvidable calificó a su maratónica participación en los Juegos Panamericanos de Guadalajara, Julio Campozano, quien en compañía de Roberto Quiroz obtuvo la medalla de plata en dobles de tenis.  

Campozano jugó 10 partidos en una semana en parejas y en singles, pero en esta última no rindió como lo esperaba, ya que el cansancio le “pasó factura” y no pudo pelear por la presea de oro, tras perder ante el brasileño Dutra da Silva, en semifinales. Este último también compitió al ritmo de Campozano y  avanzó a la final en la que alcanzó la plata y en dobles se quedó con la de bronce junto a Ana Duarte, en dobles mixtos.

Pese a esto, Campozano fue uno de los más apoyados en el Complejo Telcel de Tenis e inclusive la prensa mexicana le dio el apelativo del “hombre de acero”. “Pude rendir más del 100% de mi tenis, jugué bien a ese nivel una gran cantidad de encuentros y me fue bien. El primer partido fue el más corto, como de hora y media; ya desde la segunda ronda con Joao Souza, fueron  más largos, como de dos horas y media... Fue un poco agotador y ya en el ultimo día me costó seguir al mismo ritmo para el bronce porque solo pude jugar a un 70% y poco a poco empecé a aflojar”, contó.

Sobre los encuentros seguidos que enfrentó, manifestó que se le presentaron muchos dolores en las piernas, no calambres, pero sí agotamiento físico, por el poco descanso  que tuve entre partidos.

“Tuve dolores porque el músculo ya estaba más de 15 horas en cancha  y  es normal que me haya pasado eso, pero con el hecho de  haber aguantado tanto quedó demostrado que estoy bien físicamente y eso me tiene muy contento”, añadió Campozano.

Además, la primera raqueta del Ecuador manifestó que las programaciones de los Juegos no le favorecieron porque los singles y dobles se jugaron con solo hora y media de intervalo.

“Los horarios no me ayudaron mucho; desde el jueves (pasado) me acostaba todos los días a la una de la mañana, era súper tarde y mi recuperación tampoco fue tan larga como la que  tenían los otros tenistas y por eso fue meritoria (la actuación) ya que era el último en irme del coliseo y el que jugaba los partidos más largos”.

La base de su pronta recuperación fue la buena alimentación y los masajes por parte del cuerpo médico “tricolor”, que lo acompañó en los encuentros. “Por enfrentamiento descansaba hora y media y jugaba 3 horas en singles y luego 2 horas y media en dobles”.

Después de su agitado viaje desde México a Guayaquil, Julio iba a pasar unos días de descanso con su familia y ya mañana tenía previsto viajar a Colombia para actuar en el Challenger de Medellín.

Por su parte,  Roberto Quiroz destacó que se está acoplando más como pareja en el tenis con Julio y eso ha quedado demostrado en los últimos partidos de Copa Davis que han jugado. “Hemos entrenado bastante juntos y nos hemos sentido mejor y por suerte obtuvimos medalla. Ahora voy a descansar y a estudiar para unos exámenes”, indicó sobre su decisión de ingresar a una universidad en Los Ángeles.

“Me siento contento porque nuestros nombres quedaron grabados en la historia al haber ganado la primera plata en dobles masculinos”, dijo.