Buen arranque para el rey de la Copa América
Uruguay arrancó ayer su camino hacia el Mundial de Brasil 2014 con una victoria de 4-2 ante Bolivia en Montevideo, en un partido en el que demostró por qué es el campeón de América y en el que pudo haber anotado muchos más goles.
El capitán Diego Lugano en dos ocasiones, en el minuto 25 y el 71; Luis Suárez, en el 3, y Edinson Cavani, en el 34, anotaron para los locales, mientras que Rudy Cardozo, en el 17, y Marcelo Martins, en el minuto 86, de penalti, lo hicieron para los andinos.
Los “celestes” fueron muy superiores a los bolivianos desde el arranque del partido y desarrollaron un juego ofensivo, imposible de contrarrestar por Bolivia, muy floja además en los balones aéreos.
Ni el campo, muy pesado por la lluvia, ni el planteamiento defensivo de los bolivianos, que solo alinearon un delantero, impidieron el despliegue del equipo “celeste”, que antes del primer minuto ya había rematado con peligro sobre el arco defendido por Carlos Arias.
El gol de Suárez llegó apenas a los tres minutos de juego, cuando el delantero del Liverpool inglés recogió sin oposición un saque de esquina en el centro del área chica y maniobró para empujarla sin que ningún defensor andino pudiera hacer nada para evitarlo.
El tridente formado por Forlán, Cavani y Suárez, apoyados muy bien por Maxi y Álvaro Pereira en las bandas, siguió presionando con gran peligro sobre el arco visitante, con gran libertad y soltura ante la defensa rival.
Pese a todo, los bolivianos lucharon por mantener la posesión del balón y en su primera jugada ofensiva lograron el empate a través de Cardozo, quien se plantó solo ante Muslera, tras una buena jugada colectiva de todo el equipo, en el minuto 17.
Haciendo caso omiso al mal estado del campo, ambos equipos buscaron trasladar la pelota por el piso y construir el juego con calidad. En esta apuesta, digna de agradecer, Uruguay contó con mayores ventajas y enseguida demostró por qué ganó la última Copa América.
El segundo gol de los “charrúas” llegó otra vez gracias al balón parado, tras una falta lejana sacada por Forlán con precisión para que Lugano rematara de forma impecable de cabeza sobre el arco boliviano, en el minuto 25. La intensidad del equipo “celeste” no dejó de crecer y así pronto llegó el tercero, esta vez de Cavani luego de un pase de Maxi Pereira, en el 34.
De ahí en más, cada vez que los locales controlaban la pelota más allá del medio campo, el peligro de gol era patente para una impotente Bolivia, ya más pendiente de evitar la goleada que de remontar el resultado. Los destellos de la ofensiva uruguaya prosiguieron durante toda la segunda mitad, aunque con escasa fortuna hasta que de nuevo Lugano, y de nuevo tras un balón parado consiguiera su segundo tanto de la tarde y el cuarto de su equipo (71’).
Con todo más que decidido, el peruano Víctor Hugo Carrillo otorgó un dudoso penalti a Bolivia, que Martins se encargó de transformar para maquillar un poco el resultado, en el minuto 86.