Las selecciones masculinas de balonmano de Brasil, Argentina, Chile y República Dominicana entraron con buen pie en los Panamericanos de Guadalajara superando a Canadá, México, Venezuela y Estados Unidos, respectivamente.

Brasil se ratificó como favorito al podio al golear (46-17) a Canadá con protagonismo para Vinicius Texeira, autor de siete tantos en ocho intentos frente a una defensa canadiense que se mostró débil durante los dos tiempos del encuentro (19-7 y 27-10).

El doble campeón panamericano convirtió 16 de los 20 tiros desde los seis metros y sus porteros Maik Santos y Marco Polo Dos Santos cumplieron en su área, además de frenar la mitad de los penaltis.

Por el equipo de Canadá, el mejor productor, con tres goles en cuatro intentos, fue Daniel Devlin, mientras que Maxime Godin tuvo una eficacia del 25 por ciento al convertir cuatro de los doce disparos a puerta que realizó.

Argentina, muy superior, superó a México por un holgado 31-16 que provocó el desaliento en las gradas locales, especialmente en la primera mitad, que acabó con un parcial de 16-5.

Por su parte Chile superó a Venezuela por 37-28 en el segundo partido del grupo A, que resultó más igualado de lo que esperaban los andinos al tener un segundo parcial muy disputado (18-16).

Los hermanos Feuchtman, Emil, Harald y Emir se combinaron en el ataque chileno para marcar entre ellos 14 goles (Emil convirtió ocho de sus diez intentos).

El chileno Marco Oneto aseguró, según la agencia oficial de la competición, Witen Sports, que su país está en situación de lograr al menos la plata en el torneo.

"Capurro (su entrenador) quiere que vayamos partido a partido, pero en lo personal creo que nuestro objetivo debe ser la medalla, y no la de bronce", apuntó. "Quiero salir primero en el grupo y posteriormente luchar por las dos primeras medallas, no hay más", añadió.

Asimismo República Dominicana superó a Estados Unidos por 27-22 en una hora de encuentro tenso e igualado, en el que los criollos apretaron en el segundo parcial (16-11) tras llegar al descanso igualados (11-11).

Los máximos goleadores fueron Kelvin de León y Carlos Mirabal, por parte de los caribeños, con siete goles cada uno, y Martin Clemons, de Estados Unidos, con ocho tantos.