Barcelona volvió a ganar ayer luego de ocho fechas (49 días). Los “canarios” vencieron al Manta 2-1 en el estadio Monumental con goles del delantero colombiano Wilder Medina a los 13 y 47 minutos, en el debut del técnico Luis Soler. El atacante Cristhian Márquez descontó a los 86 minutos para los manabitas.                      

Los “amarillos” mostraron ayer una actitud distinta a la de partidos anteriores. Fue un equipo más dinámico, ordenado  y seguro en el traslado de la pelota, lo que le permitió tener una elevada posesión del esférico (68% en el primer tiempo y 75% en el segundo). En promedio, el cuadro “torero” elaboró no menos de 10 pases en cada ataque que generó. Solo en la primera etapa se contabilizaron 308 asistencias.            

A eso hay que agregarle un detalle importante, Barcelona fue ayer un equipo solidario en la marca y audaz en el momento de atacar al rival. Los volantes de primera línea respaldaron el trabajo de los defensas y los  ofensivos se mostraron y participaron más a la hora de hilvanar jugadas de peligro en el área contraria.

El ataque en bloque fue la premisa durante todo el partido. ¿Qué hizo que Barcelona mostrara un nivel colectivo más compacto? Sin dudas, la nuevas ideas que introdujo el estratega Soler tienen mucho que ver.

El argentino es partidario del toque elegante  y paciente. Para él, lo importante  es tener el balón y rotarlo en la media cancha  hasta que el adversario ceda espacio, su esquema no depende de individualidades y se sostiene más bien gracias al aporte de todo el grupo. Ese fue el argumento al que apeló Barcelona ayer ante el Manta.

Pero Soler y Barcelona aún tienen tareas pendientes. Una de ellas -y quizá la más importante- es verticalizar más su juego ofensivo y llegar con más precisión al arco contrario. En esa labor, en lo que resta del torneo,  será determinante Michael Arroyo, quien ayer dejó el costado izquierdo para  asumir la conducción del equipo desde el centro del campo. Soler advirtió el viernes pasado que le asignaría esa nueva responsabilidad al mediocampista de 26 años.      

Un detalle positivo tras la victoria, a más de los tres puntos, fue el “bautizo” ante las redes de Wilder Medina en la nómina de goleadores del equipo.