Una solitaria anotación registrada por Christian Penilla en el período inicial fue suficiente para el triunfo de Barcelona sobre la escuadra “militar”, en atractivo compromiso que se llevó a cabo ayer en el estadio Olímpico Atahualpa.

Con este resultado, el “Ídolo” sigue en quinta posición en la tabla acumulada, lo que le daría un cupo a Copa Sudamericana del 2014, pero está a solo 2 puntos del tercero, que es Universidad Católica. De poder arrebatarle esa posición al “Trencito azul”, Barcelona participaría en el repechaje de la Copa Libertadores del próximo año.

Además, los “toreros” acumulan 5 partidos consecutivos sin perder, lo que demuestra su mejoría. La dosificación de energías y la aplicación táctica bien concebida por parte del técnico Luis Soler, fueron factores de incidencia en el desarrollo del cotejo.

El Nacional desplegó un accionar punzante en los tramos iniciales, al apretar en los últimos 25 metros, hecho que le reportó dividendos al exigir a la zaga rival la cesión de cuatro lanzamientos de esquina que no reportaron consecuencias ante la buena respuesta del arquero Máximo Banguera.

Los balones cruzados proyectados desde los costados por Juan Carlos Paredes y Roosevelt Oyola provocaron desajustes en la zaga local.

La dupla torera José Ayoví- Christian Penilla  tuvo mucha lucidez en la fabricación de espacios. Fue así como, a los 22 minutos, Ayoví adelantó el balón desde la mitad de la cancha; Penilla surgió en forma sorpresiva para superar a los zagueros rivales y en rápida incursión eludió la marca de Juan Anangonó.

El achique del arquero Adrián Bone, quien salió en forma desesperada de su área, fue insuficiente para evitar el remate a ras de piso del expolicial, que remeció las redes criollas y anotó, a la postre, la única conquista del encuentro.

Las insinuaciones del volante manabita Marvin Pita no encontraron sustento en la línea de armado; Franklyn Guerra y Jairo Castillo se desconectaron fácilmente, hecho que motivó al técnico Carlos Sevilla a gesticular para que Pita juegue más arriba.

Las imprecisiones y la falta de potencia en el ataque del equipo rojo conspiraron para elaborar jugadas bien hilvanadas, a tal extremo que Edson Montaño se vio obligado a probar remates de larga distancia.

Penilla volvió a crear zozobra en la retaguardia local al aprovechar un error defensivo y “descerrajar” un remate en diagonal, que Bone desvió al lanzamiento de esquina.

El ingreso de Juan Villacrés y Jorge Valencia en filas militares para el segundo período, tuvo cierta incidencia para el cambio de actitud de El Nacional.

Marvin Pita, con mayor libertad para el armado, se insinuó con mejor criterio e inclusive ensayó una jugada con pelota quieta que estuvo muy cerca de significar el empate, pero Banguera, con mucha fortuna, se encontró el esférico en el área de los 5,50 m tras toque de Oyola.

Daniel Samaniego ingresó al campo de juego en reemplazo de Roddy Zambrano, a manera de émbolo en la línea de ataque; mientras Michael Jackson Quiñónez sustituyó al autor del gol  del triunfo, Christian Penilla, para desempeñarse en la misma función.

Aun cuando El Nacional acentuó su dominio en los últimos 15 minutos, el apresuramiento y la falta de precisión en la definición fueron obstáculos  no superados, cuando Villacrés intentó conectar golpe de cabeza a un centro de  Pita.

La hinchada amarilla, que se dio cita en buen número, salió satisfecha por el triunfo alcanzado en una plaza que le había resultado difícil.