El Real Madrid ya siente el “aliento” del Barcelona muy cerca. El conjunto azulgrana tumbó ayer con facilidad al Getafe en el Camp Nou  (4-0) y momentáneamente se coloca a tan solo un punto de distancia del líder de la Liga, que hoy (15:00) tendrá que enfrentarse ante el Atlético de Madrid en el Vicente Calderón. El Madrid es primero con 79 puntos (+73), mientras que el Barça marcha segundo con 78 puntos (+71).

Dos tantos de Alexis Sánchez, uno de Messi  y otro de Pedro llevaron al Barça hasta las puertas del liderato, quedando a la espera de otro tropiezo del líder.

El Barcelona se topó ante un rival que desde el arranque  entregó no solo la pelota sino el terreno de juego, ya que el Getafe dispuso un dibujo con jugadores alrededor de su área y cerrando cuantos espacios pudiese.

Fue sorprendente ver a nueve futbolistas del Getafe entregados a una defensa casi impenetrable.

El partido no podía tener otro desarrollo que ver al Barcelona con el balón y moviéndolo por todos los metros cuadrados en busca de un espacio para abrir la muralla rival. El alto caudal de ocasiones volvió a estar al nivel de otros partidos, pero también la baja efectividad “azulgrana” ante la meta rival, a pesar de haber marcado dos tantos en la primera parte.

A poco de llegar al cuarto de hora (13’), el Barça abrió la “lata” en una acción veloz, en la que Iniesta sirvió a Messi, este a Alexis con el pecho y el chileno, después de prepararse el balón con un toque, conectó un duro disparo que infló las redes (1-0).

Solo cuatro minutos más tarde Xavi pudo sentenciar el partido, tras el enésimo pase de Messi, el catalán definió con una vaselina perfecta sobre Codina que el “Cata” Díaz sacó sobre la línea en un gol.

El dominio de los de Guardiola, insultante por momentos, no se traducía en una mayor ventaja en el marcador, pese a que en muchas ocasiones hasta ocho jugadores culés tocaban la pelota de un lado a otro en el campo de los madrileños.

Cuando el Barça empezaba  a jugar con el resultado reapareció Messi y se asoció con Iniesta. La conexión entre ambos hizo que Guardiola se llevase las manos a la cabeza cuando la “Pulga” (44’), tras recibir un pase de tacón de Iniesta, fusiló por toda la escuadra para llevar el segundo gol al marcador y los nervios a Madrid.

La segunda mitad fue tranquila hasta que Messi y compañía quisieron. En el último cuarto del partido (73’) apareció Sánchez, marcando de cabeza tras un pase de Isaac Cuenca.

Messi, no contento con su gol y la asistencia a Alexis en el primer gol, le puso un balón a Pedro en la cabeza para que el canario marcase el cuarto gol de la noche (75’).

El partido culminó con una acción de Messi que hizo enloquecer al Camp Nou entregado al argentino, después de que la “Pulga” se llevase a cuantos rivales le aparecieron por medio, hasta que el balón lo rechazó Moyá y después el travesaño.