Angulo y Díaz terminan con el empate de victorias
Hasta que el empate por fin se rompió. Emelec y Barcelona llegaban a este Clásico con 58 victorias por bando y ayer los aproximadamente 20.000 espectadores que se dieron cita en el Monumental salieron del “Coloso del Salado” tras ver a un elenco amarillo ganador. Las conquistas fueron de Vinicio Angulo (14’), de cabeza; y Damián Díaz (88’).
Un minuto antes, de un tiro libre nació una de las más claras para los “toreros”, Matías Oyola colocó la pelota sobre el césped del Monumental y Wilmer Zumba, acrobático, la mandó al tiro de esquina.
Sobre el gramado el elenco de Luis Zubeldía, que ayer no dirigió desde la zona técnica, pues se encontraba suspendido, dibujó un 4-2-3-1, sin muchas variantes, pues Luis Caicedo -que había entrenado durante la semana de zaguero central- estuvo de medio centro junto con Matías Oyola.
Cuando Emelec más atacaba con un esquema volcado a la ofensiva (3-3-1-3) llegó el tanto “canario”. El “Pony”, desde el córner, la tocó cortito con Miguel Ibarra, quien la elevó para que Angulo, de cabeza, la mandara adentro de la portería “millonaria”, tras mala salida de Zumba.
Luego del gol, los azules “apretaron” a los “toreros” en busca del empate. En un principio los balones de la media eran proyectados hacia el costado izquierdo, por donde transitaba Nicolás Vigneri, que nunca la vio en todo el partido.
Al percatarse de que por ese costado no había proyección, los “eléctricos” inclinaron la cancha hacia la derecha, a la banda de Fernando Gaibor, que tenía más dominio de balón, y comenzó a mandar centros pasados al corazón del área, pero José María Franco se mostró estático y no gravitó como 9.
Emelec atacaba continuamente, mas al contragolpe estaba regalado, pues se arriesgó a alinear con línea de tres en un Clásico y Angulo, por derecha, sorprendió varias veces a Eduardo Morante, quien tuvo que esforzarse al extremo para controlar al “malabarista”, que ayer alcanzó 5 goles con la camiseta de Barcelona -el artillero “torero” es Iván Borghello, con 10 dianas a su haber-.
A los 19’ otra descolgada de Angulo por derecha casi le cuesta la segunda a Emelec, pero Morante cerró y el remate del delantero salió mordido, para que Zumba la mandara sobre su portería. Vigneri corrió por izquierda y le envió un centro a Gaibor, que disparó a quemarropa, pero Máximo Banguera le dijo que no al volante “eléctrico”.
La Boca del Pozo comenzó a cantar: “Hay que gritar con más fuerza si vamos perdiendo, eso se llama... tener sentimiento..., cuando Emelec anda mal su hinchada lo hace ganar...”, sin embargo, el tanto de la igualdad no llegaba.
A los 30’ otra vez apareció Gaibor, que hizo esforzarse a Banguera, quien mandó el disparo del “millonario” al tiro de esquina, por momentos los amarillos abusaron en la simulación de faltas, lo que molestó al árbitro Omar Ponce, quien le sacó amarilla a Borghello por lanzarse al piso. Ante las caídas de Díaz y Banguera, el réferi tuvo que agregar 4 minutos de reposición.
En el segundo tiempo, de arranque Vigneri tuvo una de media vuelta, pero su intento no encontró destino de red. Juan Ramón Carrasco retiró del campo a Franco y a Pedro Quiñónez, para dar paso a Édison Méndez, de alto rendimiento en los partidos de Ecuador; además, retiró del campo a Fernando Giménez -quien salió molesto del gramado- por Marcos Caicedo.
Resultado: Emelec ganó en posición, pero sigue demostrando que no tiene referente de área. De eso se aprovechó Barcelona, que al contragolpe lo mató. El segundo gol fue mérito de un Bryan De la Torre, quien ingresó al cambio y puso a correr a Díaz, que decretó el segundo tanto para los amarillos (88’), que volvieron a conocer la victoria ante Emelec en el Monumental.
El “Ídolo” no ganaba en casa desde el 5 de noviembre de 2006, cuando derrotó 2-1 a su eterno rival con dos tantos de Nicolás Asencio; para los “eléctricos” descontó Marcos Mondaini.
En estadísticas generales, la última vez que Barcelona venció a Emelec se remonta al 14 de septiembre de 2008, cuando los “toreros” golearon 3-0 a los azules en el estadio Capwell. Con este resultado los pupilos de Zubeldía son terceros, con 31 (+7) y se meten en zona de clasificación a Libertadores; mientras que los de Carrasco son cuartos, con 30 (+2).