El Olimpia (Paraguay) buscará esta noche su cuarta  Copa Libertadores en  Belo Horizonte, cuando enfrente al Atlético Mineiro (Brasil), que tendrá que remontar un 2-0 para ganar su primer título en el torneo continental.  

Para el conjunto paraguayo esta será su séptima final, pues obtuvo los campeonatos en los años 1979,  1990 y 2002; y fue subcampeón en 1960, 1989 y 2002. Su técnico, el experimentado Éver Hugo Almeida,  disputará su primera final en este certamen como entrenador. Como jugador estuvo presente en tres  finales: en la de 1979 que le ganaron a Boca Juniors (Argentina), en la de 1989 que perdieron ante el Atlético Nacional de Medellín (Colombia) y la de 1990 que le ganaron a Barcelona en Guayaquil. (Ver infografía ampliada)

Almeida cuando juega de local busca sentenciar el partido desde los primeros minutos, para eso imprime un agresivo juego ofensivo, buscando el desborde por las bandas y los remates de media distancia. Pero la situación cambia cuando se trata de jugar fuera de Paraguay, donde prefiere esperar en su cancha, tapar los espacios y aprovechar el desgaste del equipo local para liquidar con el contragolpe.

Juan Manuel Salgueiro es uno de los jugadores más destacados del Olimpia; entre sus principales características están el buen manejo con el balón y el rápido desdoblamiento desde la zona de volantes al área rival. Es ágil para desmarcarse y cuando tiene el balón procura habilitar al compañero mejor ubicado; entre sus debilidades están el desperdiciar  opciones de gol y el fingir faltas.

Por otra parte, el principal referente del Atlético Mineiro es Ronaldinho Gaúcho, quien no tuvo un buen desempeño en el compromiso de ida en Asunción.

El director técnico del Mineiro, Alexi Stival, más conocido como “Cuca”, se caracteriza por ser un entrenador  al que le gusta el buen   toque del balón. No posee tantos logros en su palmarés, en 15 años como estratega solo ha ganado cuatro títulos regionales.

Además es reconocido como un entrenador supersticioso. El hecho más insólito se suscitó cuando dirigía al Botafogo: colgó un corazón de vaca  antes de un partido.

Entre tanto, el astro brasileño Ronaldinho ha demostrado que ante la  falta de rapidez  le sobra inteligencia para habilitar correctamente a sus compañeros, es el ejecutor  de los  tiros libres.

Su liderazgo ha permitido que jugadores como Tardelli y Jo eleven su nivel en la delantera del Mineiro. Además, contribuyó al florecimiento de Bernard, porque supo aprovechar la velocidad del joven extremo.

Sin duda alguna el partido de esta noche presentará dos equipos con esquemas diferentes, uno que esperará en su cancha y otro que buscará desde el primer minuto darle la vuelta al marcador global.