Una agenda para toda la familia
“A los lobos se les dan muy bien las relaciones. Cualquiera que haya observado el comportamiento de los lobos se habrá dado cuenta de la profundidad de sus vínculos. Las parejas suelen ser de por vida. Aunque se registren conflictos y desacuerdos entre los miembros de la pareja, sus fuertes vínculos les permiten superarlos y conocer juntos duros inviernos, numerosas primaveras, largos paseos, nuevas camadas, viejos depredadores, danzas tribales y cantos corales. Las necesidades de relación de los seres humanos no difieren demasiado de la suyas”.
Clarissa Pinkola Estés