Es uno de los trabajos ecuatorianos premiados en el festival de barranquilla
Vida, un falso documental y un realizador que aprende de sí mismo
El documental Vida, del quiteño Daniel Yépez Brito, y La muerte de Jaime Roldós, de Manolo y Lisandra Rivera, fueron premiados este sábado como mejor cortometraje internacional y mejor película latinoamericana, respectivamente, en el Festival Internacional de Cine de Barranquilla. En el caso de Vida, su exhibición y los reconocimientos recibidos han despertado la expectativa del trabajo de Yépez, quien hace poco pasó por el segundo taller con el cineasta Abbas Kiarostami (Teherán, 1940), en Barcelona.
En el primero, realizado en marzo de 2014, en Colombia grabó Vida. Lo hizo en 10 días, con $ 80 y dentro de la universidad en la que se realizaba el taller. En 13 minutos Diego, uno de los realizadores, conoce a una bibliotecaria llamada Vida (Leidy Gómez)y le propone dejar su trabajo para conocer las distintas locaciones donde se graban los cortometrajes y pedirle a los directores que la dejen participar en uno de estos, pues ella siempre ha soñado con ser actriz. El realizador se empieza a involucrar en la historia de forma que se trabaja la sensación de realidad y ficción.
No había un guion de por medio, a pesar de que Yépez centra su trabajo cotidiano como guionista. Vida es el primer trabajo que nunca había escrito en papel, pero tenía claro lo que iba a suceder en cada escena.“Con la actriz grabamos en orden cronológico, teníamos claro que queríamos hacer una escena con Abbas Kiarostami, pero la configuramos para el final porque no podía haber errores”, dice Yépez.
En esta escena, Yépez juega el rol de Kiarostami. Juega de forma imprevista con lo que hace este cineasta en sus películas: trabaja con actores actorales donde estos se interpretan a sí mismos. Le presenta a Vida como una bibliotecaria, le comenta la escena que quiere, de forma que Kiarostami se involucra en la ficción sin saberlo.
Yépez se confiesa influenciado del trabajo del cineasta iraní. Comenta que luego de dialogar y trabajar con él su visión de hacer cine ha retomado su esencia “me ayudó a formarme en la estética que quiero seguir como director, me hizo entender que el cine, más que estar dedicado a un proceso ejecutivo de buscar fondos, como acá, en lo que te puedes tomar 4 años, trata de crear historias. En una película necesito actores, una buena historia y dedicarme a aprender como un niño y a explorar”, dice Yépez.
Una de las enseñanzas que le queda a este realizador de su maestro es que “aceptar los imprevistos en los rodajes es como trabajar con pescado fresco, si trabajas con una estructura rígida y acartonada es como trabajar con pescado en conservas, pero si por el contrario te abres a la realidad es como si trabajaras con los peces vivos en el mar”.
Vida fue seleccionado de 57 trabajos, entre los 5 mejores documentales realizados en el taller con Abbas Kiarostami, en Colombia para presentarse en el Festival Internacional de Cine de Cartagena de Indias. Se proyectó en los Bogoshorts, en el Festival Panorama de Cine Colombiano en París y Londres, y fue estrenado en Ecuador, en el Festival de Cine La Orquídea, realizado en Cuenca, donde obtuvo el premio a mejor cortometraje y mejor interpretación. Pero siguiendo el consejo de Kiarostami -en el último taller-:“no tomemos importancia a los premios y festivales, que el cine es subjetivo, lo único que importa es ser tú mismo”.