Trude Sojka trata de volver a su nido
Trude Sojka, artista judía de Checoslovaquia, llegó a Ecuador en los cuarenta, tras pasar por cuatro campos de concentración y perder a toda su familia, excepto a su hermano, quien vivía en Quito.
A Ecuador lo definió como “un paraíso”, recuerda Ana Steinitz, hija de la pintora expresionista y pionera del reciclaje artístico del país, donde se relacionó con artistas como Oswaldo Guayasamín y Manuel Rendón.
Mañana se realizará un homenaje a Sojka, un evento que se realizará desde las 19:00 con exposición de pinturas y la intervención de representantes de la comunidad judía, el consulado checo, estudiosas de su obra como Valeria López y María Amelia Viteri y su nieta, Gabriela Fonseca.
Ahí se promoverá la campaña “Trude Sojka vuelve a su nido”, que busca recolectar fondos a través de indiegogo para responder a una invitación extendida por el Memorial del Holocausto en Terezín, Chequia, a la Casa Cultural Trude Sojka, que administra Steinitz.
Las obras de Sojka, que solía trabajar con cemento, son pesadas y su traslado y seguro de $ 20.000. Los familiares de Sojka buscan la solidaridad de los ecuatorianos que la artista siempre resaltó. (I)