“Spider-Man: No way home”: la tercera sí es la vencida cuando Marvel Studios se inmiscuye
En 2007, Sony Pictures y Columbia Pictures lanzaron “Spider-man 3”, dirigida por Sam Raimi y protagonizada por Tobey Maguire. Y tal como pasó con “Batman & Robin” —Joel Schumacher, 1997—, ese fue el punto final en la primera saga del héroe arácnido en el mundo del cine.
¿La razón? El personaje de Peter Parker / Spider-man se volvía un chiste. Al seguir una línea más humorista, uno de los fuertes de Raimi. Esto no le hizo justicia. En realidad, esta es una película muy mala, una caricatura del héroe, si se puede decir.
En 2012, Marc Webb recibió el turno de darle un nuevo rostro y sentido a Spider-man. Andrew Garfield hizo de Peter Parker, en una aproximación más realista —hasta en los efectos especiales— y hasta con misterio incluido. Solo alcanzó a hacer dos películas —la secuela es de 2015— y ya.
Pero cuando se llegó a un acuerdo entre Sony y Marvel Studios, la historia cambió.
En 2016, Tom Holland apareció como Peter Parker / Spider-man en “Captain America: Civil War” y la suerte de este personaje cambió, como parte del Universo Cinematográfico de Marvel. Luego de hacer de este personaje en cuatro películas, Holland regresa a la pantalla en “Spider-man: no way home”, en una especie de aventura totalizadora, capaz de darle a los fanáticos todo lo que quieren y hasta más.
Jon Watts regresa a la dirección por tercera ocasión —hasta ahora ha demostrado tal capacidad para contar historias en este universo que Marvel lo ha contratado para la nueva versión de “Los 4 fantásticos”—. Y como lo hizo con “Spider-man: Homecoming” (2017) y “Spider-man: Far from home” (2019), Watts da en el clavo en todo lo que hace.
No hay un solo cable suelto, ni toma poco fiable en esta película.
Y en algo tan grande como esto, el control es importante.
La aventura total
Para esta película, Watts recurre a todo el arsenal del universo Spidey que tiene a la mano. Tanto desde Sony, como desde Marvel. Una ventaja gigantesca frente a otras piezas de este mundo de superhéroes. Y con eso consigue un filme con grandes secuencias de acción, momentos de humor, escenas dolorosas y una química tremenda entre todo el elenco, villanos incluidos.
Porque se trata de ellos, de los villanos de las películas de Maguire y Garfield que se integran a este universo, luego de que, por culpa de Peter, un hechizo del Doctor Strange —para que la gente se olvide de que Parker es Spider-man, como quedó claro al final de la entrega anterior— saliera mal y abriera una pequeña rendija en el multiverso que permite que regresen a esta película.
Así reaparecen el gran Willem Dafoe como el Green Goblin —un deleite absoluto—; Alfred Molina, Doc Oc en todo su esplendor; Thomas Haden Church como el Sandman de “Spider-man 3”; Jamie Foxx como Electro y Rhys Ifans como Lizard —de las películas que dirigiera Marc Webb—. Personajes que saltan desde sus respectivos universos desde el momento preciso que se los vio por última vez.
Con un primer acto explicativo —que incluye un cameo que hace saltar a fanáticos— y un segundo que deja en claro el peligro al que están expuestos —con una escena emotiva y dolorosa—, se llega a un tercer acto que pone toda la carne en el asador y deja por lo alto el filme. Al punto que conseguir algo importante: cerrar arcos argumentales de películas que se empezaron a estrenar desde hace 20 años.
Aquí todo es claro: Peter Parker sabe que, si regresa a los villanos a sus universos, ellos morirán, por lo que intentará curarlos antes. Esa es la misión: salvar a los malos.
El Spider-man de Tom Holland hace un recorrido total. De empezar enfrentándose a los Avengers, en un aeropuerto en Leipzig, llega a luchar por salvar a los seres malvados del filme. Watts consigue hacer todo ese viaje y se permite explicar, a lo largo de tres películas, el camino del héroe. Se podría decir que “Spider-man: No way home” es una especie de “origin story”, en función de todo lo que sucede. Y aquí, Peter Parker aprende la gran lección que necesita aprender: un gran poder no solo conlleva una gran responsabilidad, también requiere un gran sentido de lo que es correcto, de lo que se pueda ganar y lo que se puede perder.
“Spider-man: no way home”
Dir: Jon Watts
Guion: Chris McKenna y Eric Sommers
Elenco: Tom Holland, Zendaya, Jacob Batalon, Benedict Cumberbatch, Marisa Tomei, Willem Dafoe, Alfred Molina, Jamie Foxx, Rhys Ifans, Thomas Haden Church, Jon Favreau y Txxxx Mxxxxx y Axxxxx Gxxxxxxx.
Sony Pictures, Columbia Pictures y Marvel Studios, 2021