Seis países se hermanan en un solo canto coral
El profesor Fernando Gil Estrada ocupa el cargo de Director General Ejecutivo de la Fundación Didecor, la que desde hace 34 años, con el apoyo central de la Universidad de Guayaquil, desarrolla el Festival Internacional de Coros “El Canto Coral Hermana a los Pueblos”, que este año recupera a un invitado de honor: Cuba. Y como ya ocurrió en 2011, tiene invitados del Viejo Continente, esta vez con apoyo de la Alianza Francesa y el Centro Cultural Ecuatoriano Alemán, que serán sedes secundarias del encuentro.
Gil Estrada lamenta no tener más de dos instituciones que apoyan a la Fundación en la organización del Festival, para poder traer cada vez más grupos de mayor reconocimiento internacional, mayor jerarquía a nivel mundial, ya que es difícil ofrecerles a grupos europeos que vengan a cualquier ciudad del Ecuador por una semana por cuestión de costos. Aún así, a todos los invitados al festival de Guayaquil, que luego se dispara por más ciudades, se les ofrece una estadía de 15 días.
Para lograrlo, este año Gil Estrada aunó esfuerzos con Eugenio Auz y Juan Carlos Velasco, del Colectivo de Directores Corales de Quito, que organizó el 8vo Festival Internacional de Coros Ecuador 2012, Ecuador canta a la vida, en Quito, Ibarra, Otavalo, Cotacachi, Latacunga y Ambato hasta el sábado, haciendo coincidir fechas con el XXXIV Festival Internacional de Coros “El Canto Coral Hermana a los Pueblos” para que visiten el país por más tiempo el Coro de Cámara “Vocalisti Rostochienses”, de Alemania; Vocal Leo, de Cuba, y el Coro Femenino de la Universidad de Rennes, de Francia.
Así se fortalecen alianzas para abaratar costos y presentar la música coral del mundo por varias zonas de Ecuador, mientras que en Guayaquil, al igual que en 2011, todos los conciertos de gala del 20 al 24 de agosto, a las 20:00, serán en el Paraninfo de la Casona Universitaria “Pedro Carbo”, de la Universidad de Guayaquil.
Esto porque Gil Estrada hizo el cálculo y el público del Festival es de unas 500 personas, que hacen que ese espacio -que cobra vida gracias a la actividad del Coro y el Instituto Experimental de Música de la Universidad de Guayaquil, también dirigidos por el profesor- se vea repleto de cabo a rabo, y eso genera en el director de un coro la adrenalina para motivar a su grupo a dar un lindo concierto en un sitio hermoso, patrimonio cultural del Estado, “con una acústica fabulosa”.
Gil Estrada vive agradecido de todos los espacios culturales que se les puedan abrir a los grupos que trabajan con él, aunque lamenta que se terminara el convenio anual que el Instituto Experimental de Música de la Universidad mantenía con el Ministerio de Cultura para recorrer con conciertos los espacios administrados por la Dirección Cultural Guayaquil.
No hay envidia, precisa Gil, mientras más espacios artísticos haya, mejor; por ello es interesante que en Guayaquil ya no se tenga que esperar hasta el festival de coros en agosto y que Juan Carlos Urrutia, del Coro de la Casa de la Cultura, Núcleo del Guayas y Byron Sotomayor, del Coro de la Escuela Superior Politécnica del Litoral, tengan el “Encuentro de coros Ecuador” cantemos unidos y el “Festival Internacional de Artes y Música Académica (Fiama)”, respectivamente.
El XXXIV Festival Internacional de Coros “El Canto Coral Hermana a los Pueblos” empieza hoy, a las 10:00, con un concierto de Vocal Leo, de Cuba, en la Facultad de Matemáticas de la Universidad de Guayaquil; dos conciertos a las 15:00, uno en el Centro de Atención Integral Municipal (CAMI) del Guasmo, con Voces Claras de la Universidad Central de Venezuela Campus Maracay y otro en el CAMI de la 29 y Oriente con Bocapelo-Banda Vocal de Quito; y a las 20:00 en el Paraninfo de la Casona Universitaria “Pedro Carbo”, con el local Coro Adventista, el Coro Juvenil de la Municipalidad de Río Cuarto, Córdoba, Argentina y el anfitrión, Coro de la Universidad de Guayaquil.
Las demás sedes del Festival serán la Extensión de la Universidad de Guayaquil en Milagro, el Centro Cultural Ecuatoriano Alemán, las Facultades de Ingeniería Química, de Psicología, de Odontología y de Filosofía de la Universidad de Guayaquil, los CAMI de Pascuales, Playita, Malecón del Salado y Bastión y la Alianza Francesa de Guayaquil donde intervendrán los invitados internacionales y Bocapelo-Banda Vocal de Quito, mientras que en los conciertos de gala los acompañarán los Coros de Niños del Teatro Centro de Arte, de la Escuela Superior Politécnica del Litoral, Juvenil Visum Musicum, de la Casa de la Cultura, Núcleo del Guayas y de Niños de la Universidad de Guayaquil.
Todos los coros actuarán el 24 de agosto para cerrar el Festival en el Teatro Centro de Arte, a las 20:00, y se alistan conciertos en Salinas y uno muy especial, tal vez el primero, en el santuario Blanca Estrella del Mar, ubicado en la comuna de Olón.
Juan Carlos Velasco, de Bocapelo-Banda Vocal, describe como un sueño cumplido haber colaborado entre el Colectivo de Directores Corales de Quito y la Fundación Didecor para el 8vo “Festival Internacional de Coros Ecuador 2012, Ecuador canta a la vida”, ya que hace algunos años intentaron lo mismo con el maestro Enrique Gil Calderón, fundador del Coro de la Universidad de Guayaquil y el festival coral de esta ciudad.
La unión permitió constituir el encuentro de Quito en uno internacional y en conjunción con Guayaquil tener una oferta coral y turística del país de primer nivel.
Bocapelo encaja en los festivales corales a pesar de ser un ensamble vocal, porque los programas vienen desde hace algunos años abriendo los espacios para los ensambles y bandas vocales, grupos pequeños, lo que los transformaría en festivales de música a cappella.
Para Velasco venir a Guayaquil para el Festival Internacional de Artes y Música Académica (Fiama) y ahora por segunda ocasión en el Festival Internacional de Coros “El Canto Coral Hermana a los Pueblos” es siempre un compromiso y es un reto presentar el trabajo de Bocapelo porque a pesar de que aún no hay mucho público acostumbrado a su formato los han tratado muy bien.
El director de Bocapelo resalta también que persiste el plan de crear una asociación nacional de cantantes, pero el logro final será que todo tipo de artistas que hacen trabajo a cappella, alternativo con la voz, puedan tener espacios y difundir su arte en el país por lo que un festival es como una vitrina muy grande para que puedan difundir el trabajo.
Para él lo sucedido en Quito este año fue un punto de partida para seguir creciendo en cuanto a la promoción del canto en el país y para Bocapelo, después de la locura de los festivales viene el tiempo de dedicarse a su tercer CD, que está un poco aplazado, una salida al exterior este año y el próximo cumplir con varias invitaciones a festivales internacionales.