Suárez enseña estética desde la dirección de arte
Sabrina Suárez ha vivido siete años en Colombia, país al que llegó desde Argentina con el proyecto Girando Mundos, dedicado a la enseñanza de la dirección de arte.
La especialista visita la redacción de EL TELÉGRAFO y cuenta que, en esta rama de la dirección escénica, tiene más de dos décadas de experiencia. Los talleres se enfocarán en artes escénicas y cine y serán en la capital y en Guayaquil.
El pasado lunes, Suárez dio una charla en la Corporación Humor y vida, del productor Orlando Erazo. Allí hizo una introducción a su propuesta, un seminario dirigido a “armar y desarmar mundos estéticos”.
El método de la directora incluye un juego que explica el papel de la dirección de arte. El primer taller se inició el 17 de abril, en la Facultad de Artes de la Universidad Central del Ecuador, donde asistieron una docena de estudiantes, la mitad con que se trabaja en estas clases, que Suárez imparte en un país por año. Perú posiblemente sea su siguiente destino y, luego, Paraguay.
La disciplina en Ecuador
La dirección de arte, en Ecuador está íntimamente ligada a la academia. Los productores que han labrado su experiencia en el campo teatral y cinematográfico requieren también de este oficio, uno que suele notar en la puesta en escena y en la pantalla hasta ser determinante.
El teatro autogestionado y otras producciones grandes, más de 40, y una docena de películas producidas en Italia, España o Estados Unidos, en casi todos los géneros conforman la experiencia de Suárez, además de sus estudios de cuarto nivel.
“Hay lugares artísticos en que lo estético está a la espera, como obras de teatro en que se juntan los actores, consiguen sala y luces pero solo se acuerdan del vestuario y escenografía para saber que el espacio del director de arte aún no está instaurado; hay que cambiar eso y dar acceso”, explicó Suárez. (I)