La recientemente premiada Ruta de la Luna, ópera prima del realizador quiteño Juan Sebastián Jácome, llega este viernes a salas de cine de Quito y Guayaquil. El fin de semana el director ya celebraba que el Premio a Mejor Largometraje de Ficción Americano del 4to. Oaxaca Film Fest (México) les fuera anunciado justo en la semana del estreno comercial.

La película, una coproducción entre Ecuador y Panamá, es una road movie que narra el viaje que emprenden en auto un hijo y su padre, desde Costa Rica hasta Panamá.

Jácome, que vive con su esposa, la panameña Irina Cabello, en Quito, explica que el rodaje fue planteado afuera de Ecuador “porque el enfoque era tratar el tema padre-hijo”, y en ese sentido era necesario salir de Ecuador porque como es una road movie,temía que la trama se contaminara con los paisajes de las carreteras del país, la mayoría dignos de postales turísticas.

No, la trama pretendía desprenderse de los localismos y por ello las locaciones seleccionadas para el rodaje -ubicadas todas en Panamá- “no son muy turísticas, muy de postal. Se pueden ver y parecer cualquier lugar”.

DATOS

Todas las locaciones están en Panamá.

El sountrack de la película se puede descargar en www.rutadelaluna.com

La productora, la panameña Irina Caballero, es esposa de Jácome, el director.

Protagonistas: Yimmi Suárez (Tito), Luis Gotti (César) y Victoria Greco (Yadia).

Ecuatorianos en el staff: Estebanoise Brauer (sonidista), Xavier Muller (música), Daniel Llanos (asistente de dirección).

“Ruta de la Luna“ fue estrenada en el Festival de Cine de Montreal, en 2012.Ruta de la Luna cuenta la historia de Tito (interpretado por el actor cubano Yimmi David Suárez), un hombre de 32 años con albinismo.

Tito decide apuntarse en un torneo de boliche que se juega en Panamá. Hasta cierto punto, su viaje es un intento de alejarse de los suyos.

Pero su padre, César (el actor y director panameño Luis Antonio Gotti), decide que ese es un buen momento para acompañarlo y darle su apoyo en el torneo. Sin embargo, nunca han tenido una buena relación, y sus ideas sobre la vida no tienen mucho que ver.

César fue boxeador y medio machista. En cambio Tito es más sensible e introvertido. Pero Jácome explica que llevó esas diferencias más allá de la personalidad de los protagonistas. “Quería incluso llevar eso a lo físico”, dice, y agrega que César, el papá, “tiene temas con el albinismo del hijo. No lo acepta del todo”.

En Panamá hay un lugar donde existe una de las mayores concentraciones de albinismo en el mundo: la comarca de Guna Yala, un pueblo indígena que los piratas ingleses describieron en sus crónicas. Allá, a las personas que tienen deficiencia de melanina se les conoce como “hijos de la luna”, y de ahí se desprende el nombre de la película.

Ruta de la Luna muestra también una redefinición en la relación casi edípica entre Tito y César. Es que la carretera y una extraña mujer -practicante de santería- que se sube con ellos en el camino, harán a los personajes replantearse la forma en que se relacionan.

Yadia, la santera, es interpretada por la actriz teatral panameña Victoria Greco. La forma en que llegó Greco a la película es curiosa.

Rocco Melillo -junto a Jácome, el coguionista de la película- fue sobre todo quien trabajó en el personaje de Yadia. Para definir a ese personaje, se basó en Greco, de quien había sido compañero en las tablas y compañero sentimental.

Originalmente, nadie tenía pensado que Greco hiciera el papel de Yadia. En ese momento, la actriz vivía en Estados Unidos.

Pero en esas fechas hizo un viaje a Panamá y fue cuando Jácome aprovechó para hacerle un casting, “porque si el personaje fue escrito con ella en mente, sería buenísimo que fuera la actriz”.

Así, Greco se sumó a esta película que es como un “complejo de Edipo” viajando  en la carretera. Ruta de la Luna fue financiada con fondos de Ibermedia (rodaje) y el Consejo Nacional de Cinematografía (distribución y posproducción).

En 2010 el guión ganó el premio al Mejor Proyecto en Desarrollo, durante el Festival de Cine de Valdivia (Chile). “Ellos nos ofrecieron hacer la posproducción en Venezuela, pero queríamos posproducir aquí y el CNCine nos dio la facilidad”.

La película también será exhibida en salas de cine comercial de Cuenca, Ambato y Manta, pero aún las fechas no están programadas para esas ciudades.